Emilio Zebadúa, colaborador: En estos días, se inaugura el trabajo del nuevo Consejo General presidido, ahora, por Leonardo Valdés, como presidente del IFE, y la incorporación de Marco Antonio Baños y de Benito Nacif como los dos consejeros electorales que reemplacen, en una primera etapa, a Rodrigo Morales y Alejandra Latapí. Se trata del inicio de lo que podría ser un nuevo ciclo en la vida institucional del IFE o simplemente la continuación de la declinación de esta institución, como ha pasado durante los últimos meses, quizá años.

Esto, en mucho dependerá no tanto de las personas que llegan a renovar al Consejo General de IFE, sino la forma en que Leonardo Valdés y los consejeros electorales definen, si acaso, un proyecto político que tome en cuenta las circunstancias por las que atraviesa el IFE, desde por lo menos las elecciones del 2006 o quizá desde antes.

El proyecto político que Leonardo Valdés y los consejeros electorales puedan definir tiene que ver fundamentalmente con su relación con los partidos políticos y, por lo tanto, con la autonomía del IFE.

De tal manera que el reto es mayúsculo, pero lo que está en juego es si vamos a poder volver a tener una autoridad electoral independiente a los partidos políticos, que garantice que no haya abusos de ninguna de las fuerzas políticas, no solamente en los procesos electorales, sino en el desarrollo cotidiano de sus actividades y ejercicios de recursos públicos que administran dichos partidos políticos.

De tal manera que ojalá empiece un nuevo ciclo ahora con la presidencia de Leonardo Valdés, pero tendremos que estar atentos para ver si esto es así o simplemente habrá la continuación de un instituto desgastado, sin credibilidad y subordinado a los partidos políticos. Duración 2´17´´ ys/m.