Joaquín López Dóriga, colaborador: El sábado pasado se registro un desencuentro entre perredistas veracruzano y Andrés Manuel López Obrador, cuando López Obrador de visita en Songolica les negó un espacio que se pudieran subir a su templete, en este caso con los colores de Convergencia.

De acuerdo a la crónica de Diódoro Cárdenas en Milenio Diario que coincide como la de Fabiola Martínez en La Jornada; un grupo de candidatos a diputados del PRD cerró el paso a la camioneta de López Obrador para pedirle que los apoyara a ellos también que no apoyara sólo a los de Convergencia y PT a lo que López Obrador dijo a los perredistas que su prioridad era salvar el registro de PT y Convergencia argumentando que la mafia quiere quitárselos en represalia por haberlo apoyado en 2006 y después del fraude.

Y cuando los candidatos perredistas le pidieron a López Obrador que por lo menos les dejara subir al templete para acompañarlo en el mitin la respuesta de López Obrador fue rotunda, no. Ese desencuentro para mí viene a confirmar el punto terminal al que ha entrado la relación de López Obrador ya no sólo con la cúpula sino con las bases del PRD y todo por mantener el registro de PT y Convergencia de cara a su candidatura presidencial en 2012, toda vez que ha visto ya que por lo colores del PRD ya no transitaría y por eso, quiere salvar no a México, sino al PT y a Convergencia. Duración 1´32´´, ys/m.