Es imprescindible diseñar un escenario, que defina una hipótesis acerca del posible peligro a que está sujeta la instalación: lugar, fenómeno perturbador, momentos y condiciones.
Con el objeto de simular una situación lo más cercana a la realidad, se deben considerar las situaciones anteriores, acerca de los fenómenos que con mayor incidencia han ocurrido en el área geográfica donde se ubica el inmueble
Se deben plantear tres aspectos:
- Población: Para identificar el nivel de su preparación, aceptación, cooperación y confianza para responder ante una situación de emergencia.
- Organización: Para mejorar el desempeño de la misma e implementar su capacitación y actualización para afrontar una contingencia.
- Instrumentos y actividades: Para probar el funcionamiento de alarmas, señalización, extintores, así como la coordinación de brigadistas y las reacciones de las personas a los alertamientos.
Lo anterior es con la finalidad de estar preparados lo mejor posible para afrontar el impacto de un fenómeno perturbador y que permita salvaguardar en lo posible, la integridad física de las personas, los bienes muebles e inmuebles y su entorno.
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