Histórico Comunicación Social
Boletines
Agencia de Noticias
Monitoreo de Medios
Entrevistas
Galerias
Prensa Extranjera
Prensa Regional
 
 
 
comunicaciónsocial
 
años:
| 2013 | 2012 | 2011 | 2010 | 2009 | 2008 | 2007 | 2006 | 2005 |
 
meses del 2013:
| Diciembre | Noviembre | Octubre | Septiembre | Agosto | Julio | Junio | Mayo | Abril | Marzo | Febrero | Enero |
 
Boletín N°. 1521 Desmesuradas y poco objetivas las declaraciones sobre el nuevo Régimen de Inversiones del SAR: Miguel Alonso Raya

“La entrada en vigor de un nuevo régimen de inversión en el Sistema de Ahorro para el Retiro, que permite la inversión de hasta 15% de los fondos en instrumentos de renta variable y hasta el 20% en valores internacionales, es una oportunidad para reflexionar sobre varios aspectos que, -con la algarabía de entrar a la Bolsa Mexicana de Valores- se están pasando por alto, además de otros que se están exagerando”, advirtió el diputado Miguel Alonso Raya, Presidente de la Comisión de Seguridad Social.

“Hay que ser mesurados al presentar los beneficios que este nuevo régimen de inversión tendrá para los trabajadores. Cuando se afirma que gracias a la posibilidad de adquirir acciones, los trabajadores se volverán dueños de las grandes y más sólidas empresas del país, se está vendiendo una falsa ilusión. Tener acciones de una empresa y ser dueño de ella, no es lo mismo. Sobre todo cuando los tenedores reales de las acciones no son los trabajadores sino los Fondos de Inversión. Además, el grado de participación de los trabajadores y la capacidad de incidir en las decisiones y rumbo de las empresas, es algo fuera del alcance del nuevo régimen de inversión y los objetivos que persigue”, puntualizó.

De igual forma, agregó, “habría que preguntarse quién obtiene mayores beneficios: ¿los trabajadores que entran al mercado de rendimientos variables y mejorar relativamente los recursos acumulados en sus cuentas o las empresas que obtienen financiamiento de largo plazo?.
De manera similar, ver en esta medida la democratización de los rendimientos del mercado de valores, el acercamiento de ese mercado a la sociedad o la posibilidad de acceso de los trabajadores a un mercado antes restringido a unos pocos, es igualmente una falsa ilusión. Los trabajadores, explicó Alonso Raya, “no entran al mercado de valores, entran sus recursos a través de mecanismos institucionales del mercado financiero: los Fondos de Inversión de las Siefores. Igualmente, la posibilidad de obtener rendimientos tentativamente mayores, conlleva también riesgos mayores que, aún tratándose de instrumentos de inversión con capital protegido, ligados a índices accionarios, no elimina la posibilidad de caídas en los rendimientos y la disminución del valor real de sus recursos”.

Por otro lado, precisó, “hay que evaluar con seriedad los efectos que tendrá la medida sobre los ahorros de los trabajadores. Se ha dicho que los recursos invertidos en el Fondo 2 (el que incluye instrumentos de renta variable; los llamados instrumentos de inversión con capital protegido al vencimiento, ligados a índices accionarios), podrían obtener en el mediano hasta un punto porcentual más de rendimiento real anual. Lo que se traduciría en montos hasta 16% adicionales para la jubilación. Pero aquí hay que distinguir varias cosas”.

En primer lugar, comentó el también integrante del Grupo Parlamentario del PRD, “es un efecto esperado a 30 años; pero si observamos la tendencia que seguirá el 85% de los recursos, tomando como referencia la tasa real anual de Udibonos entre octubre de 2000 a marzo de 2004, que cayó de 7% a 2.79%, tenemos un escenario de decrecimiento para la mayor parte de los recursos. Así que, ¿cómo esperar que un régimen de inversión que sólo aplicará sobre el 15%, pueda compensar la caída asociada a los rendimientos del resto?”.

“En segundo lugar y derivado del punto anterior, la necesidad de ampliar las opciones de inversión es una respuesta a la sobreoferta de recursos que, seguirán creciendo a un ritmo superior de la economía en su conjunto, entonces ¿cuál será el efecto de largo plazo de esta medida? Porque el 16% que ahora puede proyectarse a 30 años y el 1% anual del que se ha hablado, se obtuvieron suponiendo que las tasas internas se mantienen. Sólo que esto es relativo en tanto no se vean presionadas por la entrada de mayores recursos al sistema. Pero este supuesto es falso: los recursos continuarán aumentando y los que quedan fuera del 15% que puede destinarse a renta variable, además del 20% de valores internacionales, eventualmente enfrentarán los mismos problemas de saturación”.

En tercer lugar, continuó Alonso Raya, “si bien es cierto que la saturación de los mercados y las presiones a las tasas de rendimiento marcan problemas graves que es necesario abordar, y esta medida ofrece una posibilidad para enfrentarlos, ésta debe contrastarse con varias situaciones”, que enseguida mencionó:

• Una, con la mejoría que permite en las pensiones de los trabajadores, que es el parámetro final del sistema. Está bien que aumenten las recursos de retiro de cada trabajador en 16%. ¡Qué bueno! Pero si se trata de cuentas que no alcanzan para contratar la pensión mínima garantizada y tienen tasas de reemplazo del 40%, ¿dónde está el beneficio?, los trabajadores no los ven. La mayoría de los trabajadores entre 1 y 3 salarios mínimos podrían no ver este tipo de beneficios.

• Dos, con los recursos fiscales que libera, dado que al incrementar los fondos reduce la carga fiscal por la compra de pensiones iguales a la mínima garantizada. Lo cual si puede representar un beneficio neto de la medida.

• Y tres, ¿cuáles son los riesgos que se enfrentan con los rendimientos esperados? Porque aquí se está hablando desde los extremos y esos pueden tener un fin didáctico claro, pero las consecuencias nunca se adaptan a los modelos: no es cierto que se trate de medidas especulativas, como bien defienden las autoridades; pero tampoco es cierto que los instrumentos estén ausentes de riesgos y que garanticen rendimientos positivos y crecientes todo el tiempo. Entonces, ¿cuáles son los escenarios que se enfrentan dadas las tendencias observadas?

Alonso Raya remarcó que “derivado de la estrategia de comunicación, me pregunto cuántos de los 22 millones de trabajadores que van a trasladar sus recursos a estos nuevos Fondos de Inversión, decidieron conciente, informada y responsablemente hacerlo. Recordemos que todo el mecanismo de traslado se construyó bajo la hipótesis de una suerte de afirmativa ficta, suponiendo que hay un costo de oportunidad para quien, por no responder, quedara fuera. De hecho, en la comparecencia del 2 de diciembre ante la Comisión de Seguridad Social con el Presidente de la Consar se abordó este asunto y él señaló que la medida se tomó con el respaldo de los representantes de los trabajadores en la Comisión”.

En resumen, concluyó, “considero que las ventajas del nuevo régimen de inversión se están construyendo desde elementos que escapan a los efectos concretos de la medida, que venden ilusiones a los trabajadores, que implican riesgos que es necesario evaluar con toda responsabilidad y que ofrecen rendimientos inciertos a largo plazo.

Por ello, en el Grupo Parlamentario del PRD hemos insistido en que la estrategia para fortalecer los sistemas de pensiones, no puede seguir siendo la de los remiendos cuando el destino nos alcanza. Por el contrario, deberíamos responsablemente hacer un alto y críticamente revisar si el camino por el que vamos es el correcto. No existe oposición a que los fondos se usen para inversión productiva: todo lo contrario. Lo que decimos es que cuidemos que las decisiones de inversión beneficien realmente a los dueños de los recursos, que son los trabajadores.

Asimismo, que los recursos que tomen las empresas los usen con sentido social para la creación de empleos y el fortalecimiento del mercado interno, no para la especulación en índices accionarios o para colocarlos en mercados externos. Y sobre todo, que avancemos hacia un sistema que permita atender los problemas fundamentales de la seguridad social. Y esto implica ampliar la cobertura, aumentar la equidad de las pensiones y atender la fragilidad del financiamiento”.

 
difusión
comunicación
 
Senado | Auditoría Superior de la Federación | Canal del Congreso | Contáctenos