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Generaría desabasto en el mercado nacional y las tiendas de autoservicio demandarían mayores importaciones, con la consecuente pérdida de empleos
Ante el riesgo de que el país no pueda movilizar más de un millón y medio de cabezas de ganado exportable a Estados Unidos por serias restricciones en materia de tuberculosis y brucelosis, que no corresponden con la realidad, la Comisión Especial de Ganadería de la Cámara de Diputados solicitó a las autoridades de Sanidad Animal llevar a cabo una estrategia, con medidas concretas, para superar esta problemática que afecta a varios estados productores.

El diputado Gonzalo Alemán Migliolo, presidente de este órgano legislativo, destacó que colateralmente, el no permitir la movilización de ganado de los estados no clasificados, generará que los rastros y empacadoras tipo inspección federal (TIF) queden sin materia prima para trabajar.

Ello, agregó, traerá el consecuente desabasto de carne a nivel nacional en un estimado de 80 por ciento, generando que las tiendas de autoservicio demanden un aumento en las importaciones, con la consecuente pérdida de empleos e ingresos para México.

Se calcula, dijo, que la pérdida para el país será en el orden de los 12 mil millones de pesos anuales, cifra que se incrementaría al perder posicionamiento en el mercado nacional y en otros países, a donde se pretende exportar carne de calidad mexicana.

Alemán Migliolo indicó que en 1993 las autoridades de sanidad animal del país se reunieron con sus contrapartes de Estados Unidos para tratar el tema de la erradicación de la tuberculosis bovina en ganado de exportación, para lo que se conformó un comité en el cual no se incluyeron todas las partes de la cadena productiva.

En dicho comité se establecieron las clasificaciones de estatus sanitario a cada una de las entidades federativas mexicanas con interés en la exportación de animales en pie a Estados Unidos, sin considerar la opinión de todos los sectores necesariamente involucrados.

Mencionó que el hecho de que existiera algún caso de sospecha de enfermedad en animales cuyo destino no fuera la exportación, no impedía que la entidad fuera clasificada como exportadora.

No obstante, dijo, en el 2002 cambiaron los criterios de clasificación, permitiendo a las autoridades de Estados Unidos revisar en territorio mexicano la situación de la entidad a clasificar y verificar la situación de animales cuya carne no va a la exportación.

"Este mismo año, las autoridades de Estados Unidos fijaron a las mexicanas un plazo hasta el 1 de junio de 2005 para adoptar las medidas necesarias y erradicar en todas las entidades federativas la tuberculosis pecuaria, estableciéndose que de existir algún animal con la enfermedad, aun cuando su destino no sea de exportación, la entidad pasaría a tener un estatus de clasificación sanitaria inferior y con ello se limitaría la movilización de animales sanos a una zona clasificada con un estatus sanitario superior.

"Este plazo impuesto por los norteamericanos ya se venció y se están aplicando restricciones a la movilización de ganado en nuestro propio territorio, aun y cuando dicha enfermedad no existe y el hecho de por sí es grave", dijo el diputado del grupo parlamentario del PRI.

Aseguró que aunque en México existe la Norma Oficial Mexicana NOM 031-ZOO1995, que establece los criterios para la movilización de ganado, no es tomada en cuenta ni por las autoridades nacionales ni por las estadounidenses.

Ante toda esta situación, indicó el legislador priista, se solicitará la comparecencia de los titulares del Senasica y de la Coordinación General de Ganadería de la Sagarpa , además de solicitar el permiso para la movilización de ganado vacuno de estados no clasificados a corrales de engorda controlados y registrados ante la autoridad de sanidad animal, así como hacer un exhorto para que se reforme la regla de movilización de ganado 031.