• Participó en la inauguración del Foro Autoridades, Democracia y Partidos Políticos, organizado por el grupo parlamentario del PVEM

Para la consolidación de la democracia es fundamental la gobernabilidad futura de México, sobre todo si se considera que para las elecciones del 2006 las encuestas establecen que difícilmente habrá un partido político que obtenga más del 40 por ciento de la votación, afirmó el diputado Manlio Fabio Beltrones, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados.

En el Foro Autoridades, Democracia y Partidos Políticos, organizado por la fracción parlamentaria del PVEM, el legislador añadió que "lo más lógico es que nos encontremos con una elección que esté dividida en tres terceras partes, dos tercios mayores y una menor, pero a final de cuentas con votaciones inferiores al 40 por ciento", según los sondeos de opinión.

La complejidad del tema de la gobernabilidad ha llevado a estudiar las experiencias de otros países democráticos y cómo éstos la han venido resolviendo sin dejar de observar sus ventajas y desventajas, a través, por ejemplo, de segundas vueltas electorales, precisó.

Añadió que existe una serie de ideas que se quieren concretizar antes de terminar este periodo de sesiones, para que tengan legalidad en su aplicación en las elecciones de 2006, como el caso del jefe de gabinete.

Subrayó que el foro permitirá enriquecer las percepciones sobre lo que debe hacerse en el futuro para consolidar nuestras estructuras democráticas institucionales, fortalecer la vida de los partidos políticos sin atentar en contra de las garantías de los militantes y prever las nuevas formas de gobernabilidad.

Señaló que del viejo debate respecto a la legalidad estamos pasando rápidamente al de la legitimidad y de la gobernabilidad.

Destacó la importancia del evento en los momentos en los que la Comisión para la Reforma del Estado está a punto de concluir con sus observaciones y propuestas que pueden delinear iniciativas, a fin de llegar a una mínima Reforma Electoral de tercera generación, en la cual se pueda dar solución a muchos asuntos que hoy se dirimen en tribunales.

En su turno, el diputado Luis Antonio González Roldán (PVEM) destacó que en materia electoral están dadas las bases para la consolidación democrática del país.

Dijo que en el marco de financiamiento de los partidos, que reviste dos formas: pública y privada, es necesario regular en torno a las sanciones que no conlleve a multas exageradas y tengan un sustento legal. Añadió que una multa o una sanción mal aplicada pone en riesgo a un partido o puede llevarlo a una quiebra técnica.

Se refirió a la necesidad de incorporar un libro en el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales que reglamente a los partidos políticos, limitando los excesos jurisprudenciales y las contradicciones que se propician. Asimismo, fortalecerlos, respetar su autodeterminación y autoorganización.

A su vez, el diputado Emilio Zebadúa González (PRD) manifestó que es necesario legislar para llenar el vacío en materias de fiscalización y regulación de la relación del partido político con las autoridades electorales y del partido con sus órganos internos, militantes, dirigentes y candidatos.

Indicó que ese proceso debe ser bajo criterios generales y claros que respeten las distintas interpretaciones y definiciones de la democracia.

Abundó que es necesario establecer en la ley los criterios a los que se deben sujetar el Tribunal Electoral y el IFE, así como las demás autoridades electorales en su relación con los partidos políticos.

Más adelante, Benito Nacif Hernández, director de la división de Estudios Políticos del Centro de Investigación y Docencia Económica, (CIDE) indicó que la sociedad no puede simplemente ser espectador sin intervenir en la forma en que los partidos consiguen fondos para financiar campañas o la cantidad de dinero que gastan en estas actividades. Agregó que esto se empezó a regular crecientemente en todas partes del mundo.

Aseguró que en México existe un régimen de partidos muy fuerte, que son funcionales en las democracias modernas, pero hay inestabilidad en sus prácticas internas, en sus procesos de selección de candidatos o de dirigencias, así como en la distribución de los recursos que reciben.

En su turno, la doctora Joy Katherin Langston, investigadora de la División de Estudios Políticos del CIDE, manifestó que los partidos políticos son fundamentales para el buen funcionamiento de una democracia moderna y no hay otra forma con la cual se puedan representar los intereses de una sociedad.

Externó que los partidos le dan a los votantes su única forma de participar en la toma de decisiones y le proporciona al ciudadano una forma de castigar o premiar a sus representantes.