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•Las aportaciones de este sector serían deducibles de impuestos

• Hay 6 millones de mexicanos analfabetas mayores de 15 años

El fenómeno del analfabetismo deriva en marginación, pobreza y problemas sociales; el analfabeta se ve impedido para encontrar oportunidades de trabajo, ejemplo de ello lo conforma la página web “chambatel”, donde es posible constatar que a menor escolaridad, son limitadas las oportunidades de empleo ofrecidas.

El número de analfabetas mayores de 15 años ubicados supera los 6 millones de mexicanos; de acuerdo con el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA), al cierre del 2002, la cantidad de compatriotas sin saber leer y escribir o que no concluyeron la primaria o secundaria, era de 34.6 millones.

Ante tal situación, la diputada Rosa Hilda Valenzuela Rodelo (PRI), presentó un punto, de acuerdo a fin de exhortar a la Secretaría de Educación Pública para que a través del INEA se aplique un programa que abata este fenómeno.

De igual forma, considera necesario convocar al sector privado para que aporte en la instrumentación de un programa que termine con el analfabetismo. El fenómeno es preocupante porque programas como “Cero Rezago Educativo”, que tiene como objetivo reducir la estadística que representa las personas mayores de 15 años de edad que no han concluido la enseñanza básica, no dan resultados.

Estos programas no han tenido continuidad en su aplicación en las entidades federativas ante la falta de inversión suficiente, mientras que año con año crecen las estadísticas del analfabetismo.

El texto leído por Valenzuela Rodelo exhorta a la Secretaría de Educación Pública para que, dentro de lo que el marco legal permita, a esta dependencia pueda convocar a organismos del sector privado a participar en la instrumentación, financiamiento y operación de un programa que de manera integral abata el analfabetismo, donde las aportaciones de carácter privado sean deducibles del pago de impuestos.

El punto de acuerdo señala que en el sistema escolar mexicano persiste la exclusión, lo cual deriva en desigualdades sociales que es preciso combatir, a partir de un esquema educativo más eficiente.

Por otra parte, hace referencia a que la instrucción educativa más completa ha significado para las sociedades la posibilidad de acceso a mayores niveles de bienestar, además, dijo la diputada, es de considerase que las instituciones responsables, deben seguir procurando la instrumentación de acciones.

No soslayamos que nuestra nación registra avances importantes en materia educativa, pero no es un resultado que debe dejarnos satisfechos, toda vez que países con igual nivel de desarrollo al nuestro han abatido el analfabetismo a porcentajes muy por debajo de los que aún persisten en México.