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Boletín N°. 2700 México está a la baja en competitividad global; ocupa el lugar 56 de 60 economías

• En ciencia y tecnología estamos a la zaga: Julio César Córdova
• Es imperativo mejorar la calidad de vida; habría un colapso social grave: Heliodoro Díaz Escárraga
• Que la ciencia sea parte de las políticas públicas: Julieta Fierro y Drucker Colín

México ocupa el lugar 56 de 60 economías evaluadas, de acuerdo al anuario de competitividad mundial, que lo coloca muy por debajo de los países con los que se tienen acuerdos de libre comercio, como son Estados Unidos, Canadá, Japón, Chile o la Unión Europea.

Así lo señaló el diputado Julio César Córdova Martínez, presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Diputados, como parte de la inauguración del Foro La ciencia y la tecnología como eje de la competitividad de México.

El legislador comentó que en los últimos cinco años se pasó del lugar 33 al 56. “Ninguna otra nación de las incluidas en el estudio muestra una caída tan fuerte en la competitividad global como la mexicana”, aseveró.

Sin duda, afirmó, hay mucho por hacer para lograr que la ciencia y la tecnología no sólo sean ejes de la competitividad, sino del desarrollo nacional; no es posible que día a día sigamos perdiendo terreno en esta área.

Córdova Martínez declaró que los indicadores del World Economic Forum colocaron a México en el lugar 55, cuando anteriormente se había situado en el 48. “En consecuencia, países como Egipto, Uruguay, Polonia e India están por encima de la economía nacional; ni qué decir de Finlandia, Corea y Chile, que se encuentran en el 1, 17 y 23, respectivamente”, declaró.

También habló de la adición al artículo 9 bis a la Ley de Ciencia y Tecnología, con el objeto de garantizar la aportación mínima del 1 por ciento del Producto Interno Bruto en tal rubro y comparó lo hecho al final del sexenio pasado en materia de inversión federal, que fue del 0.46 por ciento del PIB, en contra del 0.33 presupuestado para el 2006.

El legislador pidió unir esfuerzos con las universidades, centros de investigación, empresarios, académicos y científicos para comprometer a todos los candidatos a la presidencia de la República a signar un acuerdo para impulsar la ciencia y la tecnología, que asegure el óptimo desarrollo.

Propiciar el desarrollo para evitar colapso social: Heliodoro Díaz

En su participación, el diputado Heliodoro Díaz Escárraga, vicepresidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, hizo un llamado para erradicar la desigualdad social; es imperativo, dijo, tener una mayor capacidad para generar bienestar y mejorar la calidad de vida, pues si no “se modernizan los instrumentos para propiciar el desarrollo humano, habría un colapso social muy grave”.

Detalló que en nuestro país existe una concentración desigual del ingreso e insuficiencia de la infraestructura que son intolerables entre los grupos sociales. Para combatir esas diferencias se debe crear un “gran programa” de desarrollo social donde se estimule la participación ciudadana en el diseño y ejecución de programas.

“El concepto de política social comprende aspectos como el campo, la salud, educación, cultura, seguridad social, trabajo, vivienda, migración y pobreza. En todos estos asuntos es claro que tenemos en nuestro país grandes rezagos y debilidades”, destacó Díaz Escárraga.

Para obtener una verdadera justicia social, precisó, es indispensable que la población de todos los estados de la República tengan acceso integral a los beneficios de la educación, salud y vivienda digna; de no ser así, “el país estará condenado al estancamiento y al conflicto permanente”.

Díaz Escárraga añadió que, acorde a las metas del milenio, es indispensable erradicar la brecha existente entre ricos y pobres, a través de la enseñanza primaria universal, la promoción de la igualdad entre los géneros y el diseño de políticas para alcanzar una auténtica equidad en la distribución de los recursos públicos con mayores necesidades y rezagos sociales.
La ciencia, prioritaria: Julieta Fierro y Drucker Colín

En su exposición, Julieta Fierro Gossman, investigadora del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México, consideró fundamental que México invierta en Ciencia y Tecnología, ya que sólo así puede resolver sus problemas.

Indicó que nuestro país ha olvidado su proyecto social al no darle trabajo a los jóvenes. “Si los jóvenes no trabajan no hay riqueza, ni tiempo para las actividades de investigación, y por tanto, no existe el bienestar”.

Si queremos consolidar la investigación científica, refirió, debemos revisar la educación, a través de la generación de un solo proyecto en el tema, generar la enciclopedia de la mujer, fortalecer la educación superior, otorgar mayores recursos a los centros de investigación, fomentar los vínculos entre la investigación y la industria y darle amplitud a la ciencia donde se incluya su apreciación en la sociedad.

En su oportunidad, René Drucker Colín, Coordinador de la Investigación Científica de la UNAM, dijo que es necesario un pacto para generar año con año un incremento del PIB destinado a este rubro.

“Sería una política que en los próximos seis años se le incremente lo necesario para llegar al 1 por ciento que se ha recomendado desde hace muchos años, esto le proveería a la comunidad científica alrededor de 10 mil millones de pesos anuales, que no es una cantidad excesiva”, externó.

Aclaró que el Conacyt gasta mucho dinero en becas para doctorados en el extranjero, que después no pueden ser aprovechados porque no se ha generado un sistema de incorporación a los sistemas científicos del país.

“Hay cinco mil mexicanos que están en otros países ya preparados, que regresarían a México si se les proporciona una fuente de trabajo bien remunerada, donde puedan aplicar los conocimientos para los cuales han sido formados”, expresó.

Por último, Drucker Colín propuso generar una política pública inteligente. “Se debe convertir en política de Estado para que cada seis años no se modifiquen las políticas realizadas anteriormente; hay que pensar qué es lo que se quiere para México en el 2020, y generar las diversas estrategias que permitirían que la ciencia realmente esté al centro de la política pública del país, para transformarlo y hacerlo más competitivo”.

 
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