• La diputada Leticia Gutiérrez Corona hizo un llamado a reflexionar sobre los grandes compromisos que tienen los legisladores y ciudadanos en la materia

El cambio climático es en la actualidad el mayor desafío ambiental de este siglo, asumido en las agendas políticas de los países y señalado como grave amenaza para el desarrollo.

Así lo afirmó el Subsecretario de Planeación y Política Ambiental de la Semarnat, Fernando Tudela Abad, dentro de las actividades del Primer Encuentro Mundial de Legisladores del Agua, acerca del tema cambio climático y manejo responsable del agua, realizado en el Salón Girasoles, del Hotel Camino Real, en la ciudad de México.

“La evidencia es ya abrumadora, el cambio climático no es una hipótesis, es una realidad. Necesita cooperación internacional, tanto en la mitigación y en la causa del problema, como en la adaptación; ésta es la realidad más dura, estamos transformando la atmósfera global”, destacó el especialista.

Puntualizó que las temperaturas tardarán mucho en estabilizarse, hay un éxito del protocolo de Kyoto que nos indica que la cooperación internacional es de gran escala para bajar las emisiones, para resolver el problema.

El funcionario de la Semarnat señaló que “el cambio climático tiene que ver con otros muchos temas: el ozono estratosférico, la calidad del aire, el manejo del recurso hídrico, e indirectamente lo que va a pasar con la cobertura vegetal, particularmente bosques y una afectación a la biodiversidad”.

Tudela Abad detalló que a consecuencia del aumento de temperaturas, el deshielo e incremento del nivel de los mares “podemos esperar ampliaciones de nueve milímetros anuales; además mareas, marejadas y tormentas”.

Finalmente explicó que los cinco años más calientes de la historia son: primero el 2005, récord; le sigue 1998, 2002, 2003 y 2004, e informó que los costos para la próxima década serán de 150 mil millones de dólares al año por riesgos.

Al intervenir en el evento, la diputada Leticia Gutiérrez Corona (PRI) dijo que es prioritario vivir y disfrutar de un ambiente sano como derecho humano universal, en el que el compromiso y solidaridad de los gobernantes, parlamentarios y ciudadanos sean fundamentales en el diseño y ejecución de políticas públicas con visión de futuro, que garanticen el desarrollo sustentable de la humanidad.

Hizo un llamado a reflexionar sobre los grandes compromisos que tienen los legisladores y ciudadanos en la materia, y recordó que uno de los programas sustantivos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) es el Proyecto: la ciudadanía ambiental global, que impulsa desde hace dos años y medio una serie de actividades dirigidas a cuatro temas: biodiversidad, cambio climático, aguas internacionales y desarrollo sustentable.