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• Los edulcorantes representan un fuerte peligro para los cañeros

• 15 estados de la República se ven amenazados

Ante la posible entrada de un edulcorante que compita fuertemente con el dulce proveniente de la caña, diputados, agricultores y científicos coincidieron en la necesidad de conformar un programa de producción y competitividad del sistema fructífero del azúcar.

Durante el foro Estrategia competitiva de la caña de azúcar, celebrado en el Palacio Legislativo de San Lázaro, los participantes convinieron en ubicar para México la ruta que permita a la agroindustria tener un escenario a largo plazo que cuente con el respaldo de certidumbre y confianza para seguir cultivando el dulce.

En su intervención, el presidente de la Comisión de Agricultura y Ganadería, diputado Cruz López Aguilar (PRI) resaltó que uno de los asuntos fundamentales es que tanto en el campo como en procesamiento se pueda conseguir un alto nivel de competitividad y de rendimiento del azúcar, pero sobre todo avanzar en la diversificación de productos y subproductos.

Sostuvo que el manejo de otras actividades pueden dar mayor competitividad, de tal forma que se pueda contribuir en enfrentar la preocupación que prevalece en los pequeños productores y en los de rango mundial, de que es un problema serio para el campo cañero.

El diputado Marco Antonio Torres Hernández (PRI), presidente de la Comisión Especial de la Agroindustria Mexicana de la Caña de Azúcar, indicó que el principal conflicto en el campo es el relacionado con la tecnología, ya que las investigaciones chocan con la tradición de carga del productor.

Mencionó que la realidad en el campo es muy distinta, porque los cañeros son quienes han sostenido de alguna manera la actividad, ya que al gobierno se le nota un desconocimiento total de la industria y falta de cariño a la actividad.

Puntualizó: “Ojalá que los precios del azúcar que tanto se discuten porque van hacia arriba, no tengan que ver con el costo del petróleo, que también está muy por arriba y ahí nadie se preocupa por eso”.

A su vez, el legislador priísta Carlos Blackaller Ayala destacó que se debe trabajar en la idea de que existe una industria azucarera y otra de edulcorantes, las cuales deben ser atendidas con sus particularidades, así como conocer otras opciones productivas.

Subrayó que es importante actualizar la información en el contexto internacional, porque hoy se tiene un crecimiento cercano al cien por ciento respecto al año pasado en los precios internacionales del azúcar. Agregó que “las tendencias de los últimos años en la producción mundial han sido deficitarias”.

Más adelante, el diputado Lázaro Arias Martínez (PRI) manifestó que además de bajar el precio, es necesario plantear a profundidad un plan nacional azucarero que dé prioridad a la alternativa de salvar la industria mexicana.

Estableció que antes que hablar de Brasil o de la Unión Europea, es necesario saber cómo está la viabilidad nacional y qué se debe hacer, porque no debe perderse de vista que México es un país de sector social al que le interesa la sobrevivencia de los 15 estados donde hay producción azucarera.

Precisó que “se necesita de un plan emergente que le permita al país ser más competitivo en el mundo de los edulcorantes y a los productores de caña, que por muy pequeña que sea su superficie es un medio de vida y de supervivencia”.

Reconoció que en México hay tres variedades de caña y que aún hay mucho por hacer, como encontrar el camino donde se pueda abonar a favor de la agroindustria azucarera.