• Se realizó el Foro Propuestas para remontar la exclusión y la discriminación social

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 10 por ciento de la población mundial sufre de alguna discapacidad, mientras que cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) reflejan que en México existen 2 millones 300 mil personas con una invalidez física.

Dichos datos se dieron a conocer durante el Foro: Propuestas para remontar la exclusión y la discriminación social, organizado por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP) de la Cámara de Diputados.

Cada año se incorporan, aproximadamente, 300 personas a la estadística de pacientes que sufren, por lo menos, una de las 10 condiciones discapacitantes más comunes: debilidad visual y/o auditiva, lesiones medulares y trombosis cerebral, aseguró el doctor Luis Guillermo Ibarra Ibarra, director general del Centro de Rehabilitación de la Secretaría de Salud.

Informó que el número de pacientes crece sin ser registrado, mientras el sistema de salud se estanca careciendo de medidas que ayuden a prevenir y rehabilitar este sector.

No se dispone de servicios médicos adecuados para atender a personas con paraplejia, trauma craneoencefálico, quemados, amputados y con lesiones medulares, destacó el doctor Ibarra.

Al inicio del sexenio explicó el Centro de Prevención y Atención a Personas con Discapacidad; en el 2005, el Instituto Nacional de Rehabilitación, el número 12 en su categoría, “aunque esto no es suficiente si los sectores de investigación carecen de recursos económicos”.

Un ejemplo de que se puede disminuir la discapacidad es el combate a la poliomielitis, que en México causó tanto daño en adultos y niños dejándolos con alguna deficiencia.

La vacunación, investigación y concientización de la sociedad fueron los medios por los que se pudo eliminar esta epidemia. No se tiene un registro de personas que se incorporan a la lista de discapacidades, lo que genera poca atención a este sector.

Para ello, se precisa la participación de todo el Sistema Nacional de Salud, que detecte y ejerza las acciones médicas correspondientes para evitar alguna discapacidad.

Asimismo, Luis Guillermo Ibarra Ibarra determinó las medidas preventivas para la discapacidad: continuidad de las acciones sexenio con sexenio; emprender los servicios que hagan falta para resolver las necesidades que se generan con las diferentes discapacidades; impulsar la investigación científica y resolver el problema de medicina genómica.

El último punto sería primordial, ya que con ésta se pueden “crear” algunos órganos a partir de células del propio paciente, la biotecnología o ingeniería de rehabilitación que ayudaría a personas que requieran un trasplante.

Finalmente Ibarra Ibarra señaló que se tiene que fortalecer, ampliar y perfeccionar los centros de información para personas con discapacidad.