• De cualquier manera existiría la salida de mexicanos hacia Estados Unidos: García Ochoa

En México urge crear anualmente alrededor de un millón de empleos bien pagados, a fin de lograr mejores condiciones de vida y evitar el crecimiento de la migración a Estados Unidos, afirmó el diputado Juan José García Ochoa, integrante de la Comisión de Seguimiento a los Fondos de los Trabajadores Mexicanos Braceros.

El legislador del grupo parlamentario del PRD subrayó que no se trata sólo de generar fuentes de empleos, sino que sean trabajos calificados que le permitan a la gente superar su precaria situación económica.

Señaló que aunque en nuestro país se generaran los empleos que se requieren, los Estados Unidos demandarían cada año medio millón de trabajadores mexicanos para hacer labores que ellos no pueden , no quieren hacer o no tienen la mano de obra para llevarlos a cabo.

Abundó que de cualquier manera el flujo migratorio existiría; entonces, “lo que se debe hacer es no sólo crear en México más empleos, sino garantizar que los que decidan emigrar se vayan en mejores condiciones”.

México y Estados Unidos, explicó, actúan de manera inadecuada, porque en nuestro país no se generan las plazas necesarias y bien pagadas que requieren los jóvenes, y allá, los estadounidenses no otorgan papeles a quienes se quieren ir, aunque los necesite para que su economía sea rentable y competitiva en el mundo.
Aseguró que en México se tiene un Tratado de Libre Comercio que les da libertad a todos menos a los trabajadores. “Se puede movilizar cualquier mercancía, el capital, todo, menos los empleados ilegales que están limitados por una política absurda y deshumana”.

Más adelante, indicó que es necesario reformar la Ley Federal del Trabajo, y que es lamentable que hasta la fecha no se haya logrado consenso al respecto. “La propuesta del Presidente Vicente Fox era una reforma laboral que otorgaba flexibilidad para la contratación; sin embargo, no garantizaba nuevos derechos o asegurar que los trabajadores recibieran un salario digno.”

Agregó que en realidad era una reforma pensada para seguir manteniendo los salarios bajos y afectar los derechos sindicales.

Finalmente, García Ochoa sostuvo que se requiere una reforma laboral flexible para la mano de obra, que las empresas puedan contratar con mayor libertad, pero también que respete la autonomía sindical, permita la libre organización de los trabajadores y que se les respeten sus derechos constitucionales, como un salario digno, seguridad social, derecho de huelga, etcétera.