• Presentan el libroPesca, acuacultura e investigación en México en el Palacio Legislativo de San Lázaro

Los sectores pesquero y de la acuacultura conforman una problemática que requiere ser vista desde distintos ángulos para posicionarlos en los primeros lugares de la agenda nacional, lugar que por derecho les corresponde, a fin de ser reconocidos como asuntos de seguridad nacional, manifestó el diputado Eugenio Mier y Concha Campos (PRI), secretario de la Comisión de Pesca.

Durante la presentación del libro Pesca, acuacultura e investigación en México, celebrado en la Cámara de Diputados, el legislador dijo que hablar de estos sectores, es referirse a una sección heterogénea donde se dan cita sobre una misma realidad diversas problemáticas.

El legislador del PRI externó que este libro es un intento por lograr que desde distintas perspectivas, diagnósticos y propuestas se den las posibles soluciones a la pesca y acuacultura.

Abundó que es una recopilación de más de 40 autores, quienes tocan temas cruciales: importancia social y económica, políticas públicas y el ordenamiento, así como la preservación de las especies en su entorno y el aprovechamiento nacional y sustentable.

En su oportunidad, César Turrent Fernández, director interino del Centro de Estudios y Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaría (CEDRSSA) de la Cámara de Diputados, señaló que los presupuestos otorgados a este sector a nivel nacional han incrementado durante el ejercicio de la LIX Legislatura hasta un 268 por ciento de la propuesta del Ejecutivo.

Indicó que de acuerdo a la Sagarpa, en lo que va del año se han reducido 741 millones de pesos al presupuesto autorizado por la Cámara, situación que demuestra que no es prioritario para el Ejecutivo el sector pesquero, a pesar de que es un fuerte impulsor económico y social.

Destacó que se generan cerca de 350 mil empleos directos y dos millones indirectos, así como un volumen de producción cercano al 1.4 millones de toneladas, con un valor de 12 mil millones de pesos y una balanza comercial de más de 350 millones de dólares.

Puntualizó que la pesca es una actividad productiva de alto contenido social, ya que representa la primer opción de desarrollo económico para los sectores más necesitados. Agregó: “México hoy está atravesando por una de su mayores crisis ambientales y pesqueras de su historia, lo cual, irremediablemente, se ha reflejado en conflictos sociales”.

Precisó que de acuerdo al libro, coordinado por Patricia Guzmán Amaya y Dilio Fernán Fuentes Castellanos, ambos investigadores del Instituto Nacional de la Pesca, las opiniones se encaminan hacia que la problemática de la pesca a nivel mundial es la abusiva explotación de los recursos pesqueros, sobre todo porque los actores involucrados no reciben la atención y la solución adecuada al no contar con una estructura administrativa fuerte.

Más adelante, Sergio Antonio Guzmán del Proó, uno de los autores, afirmó que se describe en la obra la historia tortuosa y vacilante en la que los diferentes gobiernos han colocado a la pesca. “Los que han gobernado al país en los últimos 50 años no han sabido qué hacer con la pesca, ni como actividad económica, industria alimentaria y mucho menos como recurso natural”.

Subrayó que es un reclamo generalizado la necesidad de impulsar la pesca a niveles ejecutivos de la política, es decir devolverle el sitio de secretaría de Estado o de subsecretaría. Añadió que esta actividad no cuenta en el gobierno con una estructura administrativa de alto nivel ejecutivo.

Destacó que es necesario acabar con el desorden que a través de lustros y sexenios ha generado una política pesquera errática y cambiante, lo cual ha detenido el beneficio social.

Guzmán del Proó argumentó que la industria pesquera necesita de una visión de largo plazo y recursos financieros que la materialicen. “Se hace necesario recapitalizar al sector y atender el deterioro de la industria, del equipo y del ambiente”.

A la presentación también asistió la diputada Sofía Castro Ríos (PRI), Jorge Muñoz Villanueva, presidente de la Confederación Nacional de Cooperativas Pesqueras (CONACOOP), y Carlos Merigo Orellana, director de la Cámara Nacional de la Industria Pesquera y Acuícola (CANAINPESCA).