• Se inauguró foro sobre el campo mexicano

En México existe el riesgo de importaciones masivas de maíz blanco y amarillo en perjuicio de la producción nacional, a partir del primero de enero de 2008, con la apertura total del Tratado de Libre Comercio en materia agropecuaria, advirtió el diputado Cruz López Aguilar, presidente de la Comisión de Agricultura y Ganadería.

En la inauguración del Foro “Balance y Expectativas del Campo Mexicano”, indicó que en el caso particular de las oleaginosas, (semillas) nuestro país es altamente dependiente. Se importa el 95 por ciento del consumo total de frijol soya.

Asimismo, el legislador del PRI propuso que para mejorar la situación en el agro, los apoyos que se comprometen y subsidios establecidos se deben entregar oportunamente.
El diputado Cruz López Aguilar dijo que se autorizaron para este año mil 250 millones de pesos para el Programa de Maíz y Frijol de Pequeños Productores lo que es insuficiente para apoyar este sector, ya que dicho plan también va orientado a bajar costos de producción en inversiones en maquinaria.

Expuso que es necesario hacer una reingeniería de los subsidios dirigidos al campo, sin dejar de apoyar a los productores.

En tanto, el diputado Víctor Suárez Carrera (PRD), presidente del Comité del Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaria, subrayó que es necesario ubicar al campo en el centro de la agenda nacional, no bajo un tratamiento electorero, secundario o simplista, ni como un lastre del pasado.

Señaló que a 12 años de entrada en vigor del TLC, han salido 110 mil millones de dólares para comprar alimentos. “En los casi seis años de la actual administración, 50 mil millones de dólares; la balanza comercial es deficitaria, se han perdido dos millones de empleos agropecuarios, 550 mil empleos en el sector manufacturero y cerrado 11 mil 500 de estas empresas”.

Indicó que se requiere replantear el papel del Estado con relación a la agricultura y la alimentación, así como la renegociación del apartado agropecuario del TLCAN.

Dijo que no se han cumplido las acciones comprometidas al firmar el tratado, para fortalecer la capacidad productiva y competitiva, como lo reconoce el propio Secretario de Agricultura.

Propuso un plan de acción por la soberanía alimentaria, así como luchar por lograr el derecho constitucional a la alimentación, cuya minuta ya fue enviada por el Senado de la República, se aprobó en la Comisión de Desarrollo Rural y quedó pendiente en la de Puntos Constitucionales.

Mencionó que los factores críticos que se tienen que enfrentar en los próximos años, si se quiere ver el tema de soberanía alimentaria en el centro de las políticas de agricultura y alimentación, es el tema de los biocombustibles.

En el foro estuvieron representantes de la Confederación Nacional de Productores de Maíz y de la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productores del Campo, así como académicos e investigadores, quienes señalaron que uno de los mayores problemas que enfrenta el campo es la falta de apoyos y que los recursos no les llegan a tiempo.