Con el fin de eliminar el robo de identidad en el sistema financiero mexicano, el grupo parlamentario del PRI pidió exhortar a la Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios del Sistema Financiero (Condusef) y a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) a iniciar acciones urgentes destinadas a evitar ese delito.

Los diputados Fernando Alberto García Cuevas y José Porfirio Alarcón Hernández, indicaron que el robo de identidad cobra cada vez más fuerza en nuestro país y el propósito es defraudar financieramente a bancos y casas comerciales, con cargo al patrimonio de los usuarios de productos financieros, mediante la ursupación de su personalidad.

Señalaron la urgencia de que se proteja a la sociedad mexicana ante este nuevo embate de la delincuencia que amenaza con rebasar a las autoridades y, en buena medida, es alentada por la permisividad con la que se maneja la información crediticia proporcionada por la población.

Advirtieron que en la batalla por ganar tarjetahabientes, los bancos y las casas comerciales han relajado en muy alto grado los controles y candados en la información que les proporcionan los ciudadanos.

Mencionaron que de acuerdo con datos de la CNBV, el número de tarjetas de crédito emitidas en los últimos cinco años se ha incrementado en más de 100%.

Indicaron que ello se debe, en parte, a la estabilidad económica y la creación de sociedades de información crediticia (buró de crédito) que permiten a las entidades bancarias y casas comerciales contar, en un lapso casi inmediato, con el perfil financiero que tiene cada mexicano que haya recibido algún crédito.
Además, hay que considerar el elevado número de créditos automotrices e hipotecarios que se han concedido. Ello es benéfico para la población, que puede tener acceso a diversos satisfactores y adecuar su pago de acuerdo con los recursos con los que disponga.

Sin embargo, la entrega de los datos a los promotores de tarjetas bancarias no garantiza, en ninguna forma, la confidencialidad del manejo de los mismos, aseveraron los diputados.

Por lo anterior, señalaron la urgencia de frenar esos procedimientos ilícitos, que ocasionan una grave disminución de la confianza de los mexicanos hacia las instituciones financieras y comerciales del país.

Advirtieron que el robo de identidad es un delito que está creciendo a un ritmo alarmante en nuestro país, casi al mismo ritmo de otras naciones industrializadas, ocasionando un grave detrimento en el patrimonio de las personas, de las entidades financieras y casas comerciales.

Demandaron que tanto la Condusef como la CNVB lleven a cabo convenios con instituciones financieras, casas comerciales y sociedades de información crediticia, a fin de establecer candados y procedimientos que protejan a los usuarios de los servicios financieros de la ursupación de su personalidad.