El equilibrio de poderes entre el Ejecutivo y el Legislativo, y la ausencia de alguna fuerza política con mayoría absoluta en la LX Legislatura, -que iniciará labores el primero de septiembre-, debe emprender acuerdos y consensos para alcanzar las reformas que requiere el país, señalo la diputada Cristina Portillo Ayala (PRD).

Asimismo, pidió preservar la labor del Congreso de la Unión en lo que se refiere al equilibrio de poderes, debido a que su labor es crucial para los proyectos de nación. Los tiempos en que un solo partido dominaba e imponía su voluntad quedó atrás, y ahora se vive el pluralismo político, que conlleva a la democracia, destacó.

Para ello, la diputada propuso reformar los artículos 17 y 19 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos (LOCGEUM) a fin de que la Mesa Directiva sea elegida por el voto de la mayoría absoluta de los diputados presentes, mediante una lista que contenga los nombres de los propuestos con sus respectivos cargos.

Esto, ante los desacuerdos que surgen al elegir y nombrar la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, pues estas discrepancias han impedido dar certidumbre a los trabajos legislativos de la Cámara de Diputados.

Portillo Ayala añadió que con ello se fortalecerá al Poder Legislativo, ya que el cambio implicaría reformas legales, institucionales y de cultura, además de procesos de modernización, desarrollo institucional y ajustes organizativos y procesales; los cuales darán cauce a las decisiones políticas para responder con prontitud, certeza y conveniencia a las demandas sociales.

Resaltó que “sin renunciar a su identidad, los grupos parlamentarios están obligados a alcanzar acuerdos en el tratamiento de los grandes problemas nacionales o a mantener sus discrepancias en un clima de respeto”.

La diputada del PRD, sostuvo que la elección de la Mesa Directiva, a través de la mayoría calificada buscaba responder a tres preocupaciones: nombrar una Mesa Directiva con el máximo de consenso, garantizar su desempeño institucional y reflejar con fidelidad la pluralidad.

Reconoció, que debido a la realidad política actual del país, esta elección resulta obsoleta y absolutamente inoperante, por lo que plantea elegir a la Mesa Directiva por el voto de la mayoría absoluta.