Diputados, académicos e integrantes del sector campesino demandaron la urgente renegociación del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN) debido a que el sector se encuentra en descuido, deterioro, olvido y marginación por parte de las autoridades responsables.

Al inaugurar el foro Evaluación y propuestas de renegociación del capítulo agropecuario del TLCAN, la diputada Marcela González Salas y Petriciolli, en representación de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, señaló que ningún país del mundo sustenta su desarrollo económico y social sobre las bases de un campo destrozado.

Enfatizó que “el campo mexicano no aguanta más, puesto que no se puede continuar con los mismos proyectos y paradigmas que lo han llevado a un reiterado fracaso del que es imposible salir adelante”.

González Salas y Petriciolli dijo que ningún país ha logrado alcanzar su desarrollo si no tiene la autosuficiencia alimentaria, y pidió construir una patria en la que haya empleo y vida digna para todos, lo que no se puede dadas las deplorables condiciones en las que se ve al campo.

Resaltó que no debemos pensar que la migración es la solución a estos problemas y mucho menos que es una válvula de escape, sino afrontarla como actores políticos y darle alguna solución.

Más adelante, el diputado Pablo Gómez Álvarez (PRD) presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, apuntó que el Poder Legislativo no puede renegociar directamente el TLCAN con los gobiernos de Estados Unidos y Canadá, pero sí puede pugnar por su modificación.

Advirtió que lo que se necesita es un plan político para dar “una lucha que no sólo es de los productores rurales, sino de la nación mexicana por la reivindicación de sus derechos y para no permitir el atropello a la sociedad por decisiones políticas que inciden en la economía”.

Hizo un reconocimiento a los órganos legislativos creados para el estudio de mandatos legislativos concretos, de la realidad de México, y de sus contradicciones sociales ya que con base en eso, toman las decisiones necesarias.

“Una de nuestras principales tareas, subrayó, es hacer que el gobierno de México entienda esta situación, lograr que la sociedad esté dispuesta a acompañar en su lucha a los productores rurales para modificar, antes de que sea demasiado tarde, esta situación”.

En seguida, Lázaro Cárdenas Batel, gobernador de Michoacán y coordinador de la Comisión del Campo de la Confederación Nacional de Gobernadores, señaló que se requiere de un compromiso de las diferentes instancias de gobierno para que el presupuesto aprobado tenga el carácter de irreducible y multianual.

Agregó que este capítulo es el espejo más claro de la disparidad que existe estructuralmente entre México y los países del norte.

En este sentido, Cruz López Aguilar, diputado priista y presidente de la Comisión de Agricultura y Ganadería, acusó a Estados Unidos por no cumplir con los compromisos que adquirió con México después de la firma del TLCAN, pero también señaló que éste no ha hecho las negociaciones necesarias para solucionarlo.

Expresó su deseo de que el Poder Legislativo tenga un papel más activo en este problema; propuso que de no haber soluciones el Senado modifique la legislación comercial y los acuerdos con sus socios, así como que se constituya una Comisión de Comercio Exterior para analizar la situación del país, porque, apuntó,éste necesita nuevas políticas en la materia.

En tanto, el diputado Rafael Galindo Jaime, presidente de la Comisión Especial para el Campo, subrayó que la situación del agro es solamente el reflejo de lo que sucede en el país. Añadió que renegociar el TLCAN ayudaría a abatir la pobreza, la ineficacia de los servicios y la marginación.

Por su parte, el presidente del Comité del Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable, diputado Víctor Suárez Carrera (PRD) dijo que “la pelota está en nuestra cancha como nación, o tomamos decisiones compartidas como organizaciones, como poder legislativo y obligamos al Ejecutivo a compartir una agenda nacional o estaremos apostándole al caos y a la ingobernabilidad, al deterioro de nuestra democracia”.

Acotó que México debe apostarle a lo que sí puede hacer, una agenda común, y consideró que el centro de ésta debe ser el problema del campo. Pidió a los senadores que aprueben la Ley de Planeación para la Soberanía y Seguridad Alimentaria porque sería una forma de cambiar las políticas, alcanzar y mantener la soberanía alimentaria de México.

En su intervención, el doctor Sergio Barrales Domínguez, Rector de la Universidad Autónoma Chapingo, dijo que México no debe perder la soberanía por lo que debe plantear soluciones a situaciones que le son adversas; “es una prioridad nacional el renegociar el TLCAN y fundamental que se realicen acciones para proteger al campo”.

Asimismo agradeció a la LIX Legislatura por “ser eco de distintos organismos relacionados con el campo y escuchar sus planteamientos, como en este caso el de la renegociación del Tratado de Libre Comercio”.

El obispo Luis Artemio Flores, presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, expresó: “no podemos permanecer indiferentes ante la situación de los campesinos mexicanos, es importante reflexionar sobre su condición de pobreza, su exclusión de servicios como la educación y salud, pero es más importante buscar las soluciones”.

A la inauguración de dicho foro, que concluirá el 4 de agosto en el Recinto de San Lázaro, asistieron también los diputados Valentín González Bautista y Antonio Mejía Haro, ambos del PRD, así como representantes de la Confederación Nacional Campesina, del Congreso Agrario Permanente y del Gobierno del Distrito Federal.