Diputados, productores e investigadores advierten que para generar una verdadera propuesta de renegociación del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) México necesita analizar sus políticas en la materia y resolver los problemas delcampo.

Durante el foro de evaluación para la renegociación del TLCAN, el presidente del Comité del Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable de la Cámara de Diputados, Víctor Suárez Carrera (PRD), expuso que sin importar que los precios internacionales de los productos agropecuarios son bajos o altos a México siempre le va mal.

“Es el resultado de no contar con una política nacional propia de soberanía alimentaria que garantice la seguridad de los mexicanos, siempre estamos a expensas de lo que pase en el exterior”, argumentó.

Resaltó que México no necesita mirar al exterior, sino al interior, “si no tomamos hoy la decisión, que debimos tomar hace 10 ó 12 años, de impulsar la producción y productividad de granos, en el futuro veremos una crisis alimentaria de grandes proporciones con la posibilidad de hambruna”.

Aseguró que México importa al año 10 mil millones de dólares en alimentos provenientes de Estados Unidos y Canadá, pero en los próximos años si no estamos conscientes de la problemática interna la cifra se puede elevar a 12 ó 14 mil millones de dólares” advirtió.

Durante su ponencia, el diputado Fernando Ulises Adame de León (PRI), presidente de la Comisión de Recursos Hidráulicos, indicó que México tiene tratados comerciales con más de 40 países que le generan pocas ganancias; regularmente se responsabiliza a las otras naciones de esa situación, pero, dijo, ellos son los menos culpables, “los que no hemos cumplido somos nosotros.

“La tarea no la hemos hecho completa, Legislativo y Ejecutivo, no hay una política que apoye al sector, no se puede ser competitivo a nivel internacional con la pobreza que hay en nuestro campo; es la política mexicana la que falló”.

En su intervención, el presidente de la Comisión de Agricultura y Ganadería, diputado Cruz López Aguilar (PRI), manifestó que se debe trabajar al interior del país para que el Ejecutivo y los gobiernos estatales defiendan a los productores y hagan causa común de los contratiempos a los que se enfrenta el sector.

Añadió que las actividades agropecuarias del país, sean rurales o primarias,registran una pérdida de 20 por ciento en lo que se refiere a su rentabilidad. Dijo que quitar productos como maíz y frijol del TLCAN no afectaría en nada a Estados Unidos, debido a que este país no se caracteriza por ser productor.

El diputado del PRI subrayó que los cuatro productos que se liberarán en el 2008 del capítulo agropecuario del TLCAN: maíz, frijol, caña de azúcar y leche, representan el 85 por ciento de la producción nacional, por lo que esto provocaría que crezca la brecha entre ricos y pobres.

En entrevista, el investigador Steven Suppan, miembro del Instituto de Políticas Agrícolas y Comerciales con sede en Minneapolis, Minnesota, manifestó estar de acuerdo con el diputado Víctor Suárez en cuanto a que existela posibilidad, por la poca planificación del gobierno mexicano en la materia, de encontrarse con situaciones como la falta de suministro de alimentos básicos y hambrunas en el país.

“A largo plazo México debe independizarse para alcanzar una soberanía alimentaria desde la cual podría negociar términos más favorables para su agroexportación”, indicó.

Por su parte, Pierre-Yves Serinet, coordinador de la Red Quebequense para la Integración de Canadá, señaló el TLCAN resultó nefasto para este país que también sufre un deterioro en materia agropecuaria. Precisó que están en México trabajando para encontrar el camino de una lucha común por la soberanía alimentaria.