El presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, Pablo Gómez Álvarez, recibió el informe final del Grupo de Trabajo de Seguimiento a las Agresiones a Periodistas y Medios de Comunicación, que recomienda a la LX Legislatura dar seguimiento a este esfuerzo, debido a que esa profesión está inmersa en situación de peligro.

Ante diputados integrantes de ese grupo de trabajo, el legislador del PRD aseguró que el país vive una situación delicada en materia de inseguridad y los periodistas y medios de comunicación no están exentos de ser víctimas, por lo que el Estado debe asumir su responsabilidad y proteger la libertad de prensa con métodos más efectivos, no solamente proporcionando leyes.

“Ofender la libertad de expresión y en particular a la prensa, es arremeter en contra de la sociedad. Hoy no solamente los poderes públicos amenazan la libertad de prensa, también mafias como el narcotráfico, que muchas veces está vinculado a funcionarios y utilizan los métodos propios en contra de los comunicadores, lo que ha costado la vida de una cantidad muy importante de éstos”, subrayó.

A su vez, la diputada Beatriz Mojica Morga (PRD) presidenta del grupo colegiado, destacó que a pesar de que la profesión de periodista o comunicador no está catalogada como de alto riesgo, desde hace varios años el ejercicio periodístico en México se ha convertido en una de las profesiones más peligrosas.

Añadió que las amenazas, hostigamientos e intimidaciones en contra de periodistas han ido en aumento de forma gradual y constante, y una prueba es que del año 2000 al primer semestre del 2006, los asesinatos a comunicadores se contabilizaron en 23 casos y otros tres han sido registrados como desapariciones.

“Tan sólo el año pasado las organizaciones de la sociedad civil y de derechos humanos, nacionales e internacionales, registraron un saldo sumamente grave en la historia de las libertades democráticas de nuestro país por el alto número de ataques cometidos contra medios de comunicación y periodistas en general”, refirió.

Informó que en los 10 meses de vida del Grupo de Trabajo, se desarrollaron acciones diversas encaminadas no sólo al cumplimiento del mandato que le fue conferido por el Pleno de la Cámara de Diputados, sino dirigidas a concentrar la mayor cantidad de información posible sobre las agresiones contra comunicadores en todo el país, a fin de brindar un panorama más claro sobre estos “vergonzosos actos”.

Por su parte, el diputado Jesús González Schmal, de Convergencia, señaló que nuestro país vive un momento crucial y hasta trágico de nuestra historia contemporánea porque hay un constante acecho e incluso ultimación de reporteros en el ejercicio de su profesión.

Mencionó que el Grupo de Trabajo constató que el Estado ha sido débil para contener la inseguridad generalizada en todo el país y los periodistas son víctimas de la misma angustia.

Los diputados González Schmal y Mojica Morga coincidieron que es necesario que una instancia semejante al grupo de trabajo sea instalada lo más pronto posible en la próxima legislatura, no sólo para dar continuidad a las tareas de la agenda pendiente, sino para mantener el impulso del fortalecimiento de la libertad de expresión.

El informe final destaca que hasta el 31 de diciembre del año pasado se radicaron en la Comisión Nacional de Derechos Humanos 208 expedientes de queja por parte de periodistas, sin contar los recientes ataques a medios de comunicación ocurridos en los estados de Oaxaca y Quintana Roo.