En México, la violencia familiar afecta al 50 por ciento de las mujeres, debido a que de cada 10 hogares en 7 hay agresiones, por lo que la diputada Blanca Gámez Gutiérrez (PAN) solicita que se persiga este delito de oficio y no por querella.

A través de una iniciativa de reforma a los artículos 265 y 343 Bis del Código Penal Federal, la legisladora pide que la autoridad judicial modifique su actitud en el combate de estas agresiones, debido a que por cada 10 mujeres que sufren violencia familiar, sólo cuatro recurren a la denuncia penal y sólo tres logran iniciar un procedimiento formal.

La propuesta de la legisladora señala que con la reforma se aplicará una sanción efectiva a los agresores que ayude a remontar patrones culturales de la violencia doméstica y disuada de seguir cometiendo tan graves violaciones a los derechos humanos de la mujer.

En la fundamentación indica que la violencia se manifiesta como agresiones sexuales, maltratos físicos y amenazas. Añade que cuando el ataque se produce en el seno familiar es más grave, porque hay casos en donde los cónyuges o concubinos asesinan a sus parejas a golpes.

Refiere que el maltrato de la pareja es un problema mundial y que en México ha llegado a niveles alarmantes.Agrega que estos conflictos nada tienen que ver con la clase social o el nivel educativo, pero las mujeres pobres y marginadas son las víctimas más vulnerables.

La propuesta de la diputada Gámez Gutiérrez puntualiza que a nivel internacional el 20 por ciento de la población femenina ha sufrido de malos tratos o agresiones sexuales.

Destaca que dados los vacíos legales que hay al respecto, no se puede concluir con exactitud cuántas mujeres son agredidas dentro del matrimonio.

Pide a la sociedad cambiar los estereotipos y acabar con las ideas culturales erróneas para evitar la discriminación de la mujer en la sociedad. La educación en valores, los cambios legales y la divulgación de una cultura de la no violencia son las herramientas que se requieren para combatir las agresiones.

Menciona que la reforma a los artículos 265 y 343 Bis del Código Penal Federal busca que las mujeres detecten conductas que pueden desencadenarles actos de agresión y protegerlas a través de la persecución del delito de oficio y no por querella.

La multa para quien cometa el delito de violencia familiar será de seis meses a cuatro años de prisión y se le sujetará a tratamiento psicológico especializado.