Bajo el argumento de que el sector energético tiene obstáculos en su modelo financiero y de gestión que le impiden aplicar la potencialidad para incidir de manera significativa en el crecimiento económico, diputados del PAN, PRD, PRI, PVEM, Convergencia y Nueva Alianza se pronunciaron por analizar y modificar estos esquemas a través de una Reforma Energética, pero, sin perder la soberanía.

Durante el debate que se difunde en el programa semanal “Frente a las Cámaras”, los legisladores coincidieron en la necesidad de consolidar a Petróleos Mexicanos (PEMEX) y a la Comisión Federal de Electricidad, para generar empleo, bienestar, desarrollo y crecimiento económico.

Para lograrlo, consideraron fundamental la Reforma Energética y la inyección de capital de inversión, elementos en donde cada grupo parlamentario tiene una propuesta diferente.

Al manifestar su postura, el diputado David Maldonado González (PAN) propuso darle autonomía de función a PEMEX, basada en la revisión exhaustiva de sus resultados operativos, para ello, dijo “tenemos que buscar esquemas y no cerrarnos a la combinación de modelos entre Estado e inversión privada”.

El también presidente de la Comisión de Energía, agregó que su bancada no pretende privatizar el sector, sino buscar modelos combinados, donde el gobierno no pierda la rectoría de gestión.

“Se requieren alternativas para que PEMEX tenga un régimen fiscal adecuado, pero sobre todo que tenga suficientes recursos para que ellos también sigan creciendo y se modernice el sistema”, refrendó.

Por su parte, el diputado Antonio Soto Sánchez (PRD) determinó que para lograr la Reforma Energética se requiere una Reforma Hacendaria que aumente el número de contribuyentes para que el fisco deje de depender de PEMEX y de la renta petrolera para subsidiar el gasto público del Presupuesto de Egresos de la Federación.

Sostuvo que PEMEX y la Comisión Federal de Electricidad, son dos empresas financieramente viables, con recursos suficientes para modernizarse, altamente competitivas en precios a nivel internacional, eficientes y con abastecimiento hacia la demanda nacional de calidad, por lo que aseguró que es falso el argumento de que se requiere de capital privado para impulsar al sector.

“Lo que nos urge hacer es una reforma que le dé autonomía a PEMEX y que como empresa de Estado tenga que pagar un porcentaje de los aprovechamientos de los yacimientos petroleros, pero sin descuidar sus recursos para la reinversión y para la modernización”, aseveró.

Aseguró que con una correcta administración de empresa se logrará obtener una “renta” que permita al país crecer económicamente, generar empleos y distribuir la riqueza entre todos los mexicanos.

Gerardo Lagunes Gallina (PRI) propuso una revisión en los excedentes petroleros y aprovechar los altos precios a nivel internacional para invertir y darle el mantenimiento adecuado a las instalaciones que eleven a PEMEX como empresa generadora de empleos y palanca de desarrollo.

El diputado priísta reconoció que entre las diversas fracciones parlamentarias representadas en la Cámara de Diputados el problema y la discrepancia principal consiste en aceptar, o rechazar, la participación de capital privado en cualquier ramo de la energía.

Sin embargo, propuso “dividir” el problema por sectores, analizar sus particularidades y resolver la problemática que enfrentan.

A su vez, el diputado Manuel Cárdenas Fonseca (NA) se pronunció por revisar a fondo la estructura administrativa, programática, funcional y jurídica del consorcio petrolero para determinar si está obedeciendo a los tiempos actuales y a los términos de competencia y competitividad que le permitan insertarse como una de las grandes empresas en elmundo.

Añadió que su bancada está de acuerdo en darle mayor autonomía administrativa y de gestión a PEMEX para que los recursos energéticos generen inversión productiva, sin embargo, estimó que se requiere voluntad política para armar un acuerdo y reconocer el momento en el que está situado México interna y externamente.

Sobre la intervención de capital privado, Cárdenas Fonseca dijo que no se debe de ver como dogma, sino analizar sus elementos positivos y negativos, porque “si México quiere crecer a una tasa del cuatro y medio por ciento, en ocho o nueve años pasaremos de ser un país productor a ser un importador de petróleo, entonces es necesario acercar posiciones”, insistió.

Por su parte, el diputado Cuauhtémoc Velasco Oliva (Convergencia), planteó una revisión a fondo del sector energético, establecer precios competitivos en gasolinas y tarifas eléctricas, así como corregir el modelo de gestión para evitar que la paraestatal siga siendo “presa” del contratismo y la “caja chica” del Gobierno Federal.

“PEMEX financia cerca del 40 por ciento del gasto público federal. La renta petrolera ha sido fundamental en este sexenio para financiar el gasto corriente del Gobierno Federal, el crecimiento de la burocracia y los sueldos estratosféricos”, reiteró.

También consideró inoperante que la paraestatal tenga que solicitar autorización a la Secretaría de Hacienda para realizar el gasto y las inversiones para endeudarse, por lo que propuso romper con ese esquema de dependencia, rediseñar el sector y que la Secretaría de Energía sea la que norme, dicte las directrices y haga la planeación.

En el mismo sentido se manifestó el diputado José Antonio Arévalo González (PVEM), quien aseguró que el legislativo debe apoyar al sector para que cuente con los recursos necesarios para invertir y dejar de destinarlos a la federación, “tenemos que encontrar la manera de que el país pueda seguir recibiendo recursos, pero no específicamente de PEMEX”, añadió.

Indicó que actualmente se importan cinco mil millones de dólares de gasolina contra los mil 400 millones de dólares que se exportan, por lo que instó a una reforma fiscal que permita crear las refinerías necesarias para ser autosuficientes.

Asimismo, sugirió el uso de energías renovables, como la solar, eólica, y la generada a través de la caña de azúcar como mecanismos alternativos.

-- ooOoo --