En reunión con eldirector del Infonavit, Víctor Manuel Borrás Setién, diputados de oposición coincidieron en que es necesario rediseñar la Ley de Vivienda para beneficiar directamente a los trabajadores y no a las grandes empresas constructoras o instituciones de crédito bancario.

En tanto, el funcionario afirmó que el Infonavit tiene tasas de interés por debajo del mercado y quien quiere participar en la construcción de vivienda tiene que adaptarse a las políticas de ese instituto, así como a la capacidad de compra del trabajador.

Destacó que, en lo que va del sexenio, el instituto ha otorgado un millón 816 mil créditos para vivienda, lo que significado una derrama de 364 mil millones de pesos para beneficio de aproximadamente 8 millones de mexicanos.

“También hemos logrado atraer recursos de la banca privada para incrementar el monto de los créditos”, subrayó.

El presidente de la Comisión de Vivienda, diputado Diego Aguilar Acuña (PRI) indicó que todos los trabajadores deben tener el mismo derecho para adquirir un crédito para una vivienda digna y decorosa, que cumpla con todos los servicios y que quienes perciben menos ingresos o están en extrema pobreza no sean marginados.

En este sentido, pidió hacer un esfuerzo para que los financiamientos sean más accesibles en todo el territorio nacional.

En tanto, el diputado Joel Arellano Arellano (PAN) planteó la necesidad de reformar el marco legislativo paraque se construyan viviendas de mejor calidad y preguntó qué se está haciendo en el ámbito rural.

Por su parte, el diputado David Mendoza Arellano (PRD) señaló que el perfildel Infonavit no es social, “corresponde y obedece a los intereses de las grandes constructoras y se concentran principalmente en los estados del norte”.

Pidió que los subsidios lleguen directamente a los trabajadores y no a los constructores. Preguntó qué se hará para que las personas que ganan menos de tres salarios tengan acceso a estos créditos.

De la misma bancada, el diputado Juan Manuel San Martín Hernández pidió corregir la Ley de Vivienda, pues “existe un gran negocio que favorece a algunos funcionarios y ex funcionarios, así como a los banqueros, y la economía de los grandes desarrolladores de vivienda, mientras que el gran perjudicado es el trabajador porque adquiere una deuda de 15 a 30 años”.

Por el PRI, el diputado AlfredoBarba Hernándezpreguntó por qué muchas viviendas que los trabajadores abandonan debido a lo reducidos espacios, el Infonavit las vende a los promotores en un costo de hasta 40 por ciento del real, cuando sería más factible que se las ofreciera a quienes no laspueden pagar por tener ingresos de uno y medio a dos salarios mínimos.

Añadió que es necesario modificar la Ley del Infonavit, para evitar que sólo puedan adquirir créditoslos trabajadores que ganan cuatro salarios mínimos. Asimismo para que sean de mayor tamaño las viviendas y que vayan creciendo de acuerdo a las necesidades de la familia.

La diputa da María Elena Torres Baltasar (PRD) dijo en los últimos años el infonavit ha desatendido el mandato constitucional del artículo 123que determina que toda empresa está obligada a proporcionar a los trabajadores habitaciones cómodas e higiénicas, así como crédito barato y suficiente.

En su turno, el legislador Sergio Augusto López Ramírez (PVEM) opinó que los créditos del Infonavit son muy altos, por lo que sehan convertido en las modernas tiendas de raya. Preguntó qué se puede hacer para acortarlos.

Los diputados de la Comisión de Viviendase refirieron también a las precarias condiciones de los edificios multifamiliares que en algunos casos son una amenaza para la vida de las personas que los habitan. Preguntaron si a través de Infonavit se puede instrumentar un programa de rescate para esos edificios o si hay la facilidad de algún programa que permita la rehabilitación de los mismos.

En respuesta Borrás Setién consideró que es importante dar crédito a los que ganan menos de cuatro salarios, pero los que tienen menos ingresos cuentan con subsidios por parte del gobierno federal para aumentar su capacidad de compra.

Coincidió en que es importante cada vez dar una vivienda digna de mayor tamaño, donde el trabajador tenga una mejor calidad de la vida.

Advirtió que la ley actual tiene restricciones como el hecho de que cada trabajador sólo puede obtener un crédito; sin embargo con las capacidad de los últimos años y los recursos financiables es posible que tenga más de uno. De ahí que es necesario reformar dicho ordenamiento para que el Infonavti otorgue los créditos que sean necesarios.

Aclaró que en el caso de las viviendas deterioradas, el consejo de administración del Infonavitha autorizado recursos para reconstruir o incluso restaurar su vivienda, cuando existe un peligro real para las familias.

Mencionó que en el 2000, el monto de los créditos era de 165 mil pesos y al 5 de noviembre el cheque promedio subió a 250 mil pesos, además de complementarse con recursos aportados por la banca privada para financiar a los trabajadores que tienen más ingresos.

Subrayó que dentro de las perspectivas del Infonavit para el periodo 2007-2011, la más importante gira en torno a que a partir del 2010 el instituto pueda expedir un millón de créditos al año.

Para finales de este año, indicó, la meta es cubrir los 435 mil créditos y para el 2007 se estima que serán entre 500 y 540 mil los préstamos para vivienda de los trabajadores.

“El reto para el próximo año es que para potenciar el otorgamiento de créditos se debe acrecentar la solvencia financiera del instituto, su capacidad operativa y que haya una oferta de vivienda suficiente”, mencionó.

Recalcó ante los legisladores de la Comisión de Vivienda que para cumplir estas metas se debe mantener la inercia que el instituto tiene, a pesar de la transición sexenal.

“Tenemos que acrecentar nuestra atención a quienes menos ganan, lograr una mejor coordinación del sector financiero hipotecario y participar más en el mercado secundario de hipotecas. Además, tenemos que promover la vivienda usada, la movilidad habitacional y la cultura patrimonial”.

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