Quedó formalmente instalada Comisión Especial de la Cuenca Lerma-Chapala-Santiago con el objetivo de buscar soluciones legislativas, presupuestales y técnicas a la problemática de la región, ya que la situación que atraviesa es crítica.

Durante la instalación, el diputado Joel Arellano Arellano (PAN), presidente de la misma, destacó que el trabajo se orientará a la verificación del agua, volúmenes, instalaciones y funcionamiento de las plantas hidrométricas, así como a la elaboración de un proyecto presupuestal y acciones concretas para implementar un programa de manejo integral del agua de la cuenca.

Señaló que se deben buscar más recursos para enfrentar la problemática de la zona y añadió que su trabajo debe centrarse en la revisión del marco jurídico actual, así como en su correcta aplicación por parte de los tres órdenes de gobierno, organismos no gubernamentales y sectores productivos, quienes –dijo— deben actuar con responsabilidad y urgencia en esta materia.

Asimismo, se pronunció por construir un modelo a seguir para el resto de las cuencas del país, para resolver los conflictos, sin colores partidistas y sumando esfuerzos por el cuidado, conservación, restauración y mejoramiento de este sistema acuífero.

Durante la reunión, diputados del PAN, PRD y PRI hicieron énfasis en la necesidad de resolver el problema de la contaminación, distribución y manejo de las aguas de la cuenca; ratificaron el compromiso de dejar de lado los intereses personales y de partido para verificar el cumplimiento de acuerdos que mejoren la calidad del agua y etiquetar recursos para que no se abandonen las plantas tratadoras.

Asistió a la reunión César Coll Carabias, funcionario de la Comisión Nacional del Agua, quien informó que la Cuenca Lerma-Chapala-Santiago es una de las 13 macro-cuencas del país, en donde habitan 14 millones de personas, por lo que es necesario implementar programas de uso y re-uso del agua pues la disposición de aguas pluviales cada vez será menor.

Explicó que aún cuando se ha hablado demasiado de la instalación de plantas de tratamiento, los municipios dan prioridad a otras acciones como la repavimentación y la seguridad pública.

Indicó que el año pasado había 400 mil millones de pesos que no se ejercieron. “En la Conagua manejamos un recurso muy escaso, hay un gran rezago en obras hidráulicas en el país y no podemos dejar ese dinero en un sub-ejercicio de 400 millones de pesos, cuando hay tantas poblaciones menores de dos mil 500 habitantes que no tienen acceso al agua”.

Añadió que para la cuenca hay 27 millones de pesos, que no alcanzan “ni para quitar el lirio del lago de Chapala ni de presas”. Por ello, destacó que es necesario buscar más recursos para trabajar en las necesidades de la cuenca y evitar conflictos futuros.

Asimismo, se hizo la propuesta de plan de trabajo 2006-2007, que plantea la creación de mecanismos para verificar el correcto funcionamiento de las instalaciones hidrométricas existentes en la región comprendida por la Cuenca Lerma-Chapala-Santiago; ordenar evaluaciones para conocer la calidad del agua y su volumen, así como elaborar un proyecto presupuestal y de acciones concretas para implementar un programa de manejo integral de largo plazo para la cuenca.

Además, la revisión de las legislaciones existentes para mejorarlas y adecuarlas a los tiempos y las necesidades actuales; la realización de foros y reuniones periódicas con los tres órdenes de gobierno de la región para obtener acuerdos que propicien una adecuada y equitativa distribución del sistema hidráulico.

También, se propone conformar un sistema de información uniforme y especializado de la cuenca; manejar indicadores de impacto y desarrollo sustentable; implementar acciones para reducir los niveles de contaminación del agua y el deterioro de los recursos naturales en la zona, así como promover desarrollos científicos y tecnológicos para elevar la calidad ambiental, reducir el consumo de agua, generar empleos e incrementar la productividad.

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