Es necesario reestructurar el Tratado de Libre Comercio a fin de proteger a ocho millones de campesinos que en 2008 se verán seriamente afectados por la apertura del capítulo Agropecuario del acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá.

Afirmó lo anterior el diputado Rutilio Escandón Cárdenas (PRD), presidente de laComisión Especial para dar seguimiento al Acuerdo Nacional para el Campo y al Capítulo Agropecuario del TLC, durante su instalación.

Señaló que si no se consigue la reestructuración del acuerdo comercial, se buscará la manera de apoyar a los agricultores, sobre todo a los pequeños, a los campesinos, y ver de qué forma el gobierno mexicano puede enfrentar la crisis.

Ante la liberalización del arancel para productos básicos, como frijol, maíz y caña de azúcar, el legislador perredista explicó que de los 39 millones de mexicanos económicamente activos, ocho millones son los más afectados por el TLC, ya que el campo tiene una fuerte influencia en la economía mexicana.

Por ello, continuó, esta comisión mantendrá una estrecha relación con el Senado de la República para analizar la posibilidad de que el gobierno mexicano, en el concierto internacional, busque las medidas que amortigüen esta situación.

Agregó que se desarrollará un trabajo muy cercano con el Gobierno para analizar la posibilidad de reestructurar el TLC, pues ya hay experiencias de otros países donde se ha dado una reorientación de los tratados de libre comercio, cuando éstos los afectan.

Escandón Cárdenas destacó la dificultad que representa para los productores campesinos mexicanos competir con los de Estados Unidos.

“Es una competencia desleal, pues allá hay subsidios y apoyos muy importantes para el campo, mientras que en México, con el TLC y la política neoliberal, se han vistomuy afectadas las mayorías que trabajan en el campo”.

Asimismo, indicó que en los últimos años ha bajado la producción alimentaria del campo, a la vez que ha incrementado el índice de migración campesina hacia el norte. “Es una vergüenza que teniendo México una mano de obra tan calificada en el campo, nuestros trabajadores se estén yendo a Estados Unidos y Canadá”, subrayó.

En este sentido, afirmó que este asunto debe verse de manera muy seria, porque no es para menos que el campo mexicano cada vez esté más abandonado.

En lo legislativo, adelantó que se buscará trabajar con todas las comisiones relacionadas con el campo para presentar, a través de ellas, las propuestas pertinentes para que sean dictaminadas y votadas, tanto en la Cámara de Diputados como en la de Senadores, en donde se buscarán los acuerdos en comisiones unidas del congreso, así como el apoyo de instituciones gubernamentales para favorecer al sector campesino.

Puntualizó que el trabajo con la colegisladora es indispensable para determinar lo más conveniente para el país. “El seguimiento al Acuerdo Nacional para el Campo y al TLC es fundamental; debemos participar todos y ponernos de acuerdo, porque una mala actuación o decisión de los que representamos a esas grandes mayorías que se están viendo afectadas, puede empeorar la crisis que atraviesa el agro mexicano”.

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