Diputados de la Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía coincidieron en que es necesario diseñar un marco legal para las radiodifusoras comunitarias, toda vez que los contenidos informativos de éstas pueden generar conflictos, e incluso, representar un asunto de seguridad nacional.

Durante una reunión de trabajo con la vicepresidenta de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias, Aleida Calleja, los legisladores Daniel Ludlow Kuri (PAN), Moisés Dagdug Lüzowa (PRD) Humberto López Lena (Convergencia) y Carlos Alberto Puente Salas (PVEM), hicieron énfasis en la reglamentación de dichas emisoras ya que, a la fecha, operan sin permiso entre 30 o 40.

Ludlow Kuri destacó que se debe tener cuidado con el manejo de este tipo de radio y en particular de los contenidos, además de cumplir con los requerimientos legales.

En el papel, dijo, se ve muy bien el derecho a la información y libertad de expresión de las comunidades; sin embargo, añadió, hemos visto que las radios comunitarias se prestan para cuestiones políticas; para manipular a la gente y sobre esto hay muchos casos, es un problema incluso de seguridad nacional.

“Yo me pregunto si en las comunidades hay dinero suficiente para mantener una estación de radio. Creo que no porque hay necesidades prioritarias y sabemos muy bien que los financiamientos provienen de otros lados”.

A su vez, el diputado Moisés Dagdug destacó que hay estaciones que se dicen comunitarias y que en realidad son medios religiosos o con sesgo político que pudieran, en un determinado momento, generar conflictos. “Estamos a favor de la libertad de expresión, pero también es cierto que debe haber reglas claras”.

Insistió en que se debe establecer una definición exacta de radios comunitarias para distinguirlas de aquellas que pueden representar un peligro por su contenido político o religioso.

El diputado Alberto Puente Salas coincidió que las radios comunitarias deben tener una mayor cantidad de requisitos porque puede haber financiamiento dudoso.

“Sería muy delicado que los apoyos provengan de alguna agrupación religiosa o ideológico-política. Veríamos muy grave que las estaciones se partidizaran, por lo que el Estado tendrá que ejercer una vigilancia mucho mayor y hacer una evaluación de su funcionamiento”.

El diputado Humberto López Lena cuestionó si estas emisoras han analizado qué pasará cuando entre en función la digitalización de medios electrónicos.

Además, cuestionó respecto a los efectos que tendría para este tipo de radiodifusoras la recién aprobada Ley de Medios.

Sobre el tema, la diputada del PRD, Aleida Alavez Ruiz, recordó que su grupo parlamentario presentó una iniciativa de reforma a la Ley de Radio y Televisión, precisamente para que las radios comunitarias cuenten con recursos públicos y logren, entre otras cosas, la reconversión tecnológica.

El diputado José Antonio Díaz García (PAN) aceptó que el diseño de un marco legal para las radios comunitarias es una asignatura pendiente, por lo que esta Legislatura se abocará a ello.

En su participación, la vicepresidenta de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias, Aleida Calleja, aceptó que se debe legislar al respecto, ya que la obtención de los permisos sigue siendo un problema y, en este sentido, mencionó que a la fecha, sólo 12 de entre 40 o 50 radiodifusoras que hay de su tipo en el país, han obtenido el permiso correspondiente.

Destacó que hay muchos mitos y campañas negativas sobre estas emisoras y resaltó que no hay manejo de recursos oscuros como se pretende hacer creer, ya que los apoyos provienen de fundaciones y organismos internacionales como la ONU, UNESCO y la Unión Europea, entre otros.

Mencionó que la radiodifusión comunitaria no es nueva en el mundo y que es un sistema que se ha desarrollado desde los años 40 en América Latina, cuya función primordial es atender a grupos de población en situación de vulnerabilidad y pobreza y permitir su acceso al derecho de información y la libertad de expresión.

“Grupos que pueden ser campesinos, urbano-marginales, indígenas o algunos otros sectores que no necesariamente están vinculados con la pobreza, como el infantil, mujeres o las minorías sexuales”.

Aseguró que la mayor parte de radiodifusoras comunitarias son asociaciones civiles sin fines de lucro y que no tienen que ver con filiaciones partidistas o religiosas.

Finalmente, advirtió que de no modificar la ley en la materia, se corre el riesgo de desaparecer a dichas radiodifusoras. “Estamos de acuerdo, se deben poner candados y garantizar que esta radiodifusión cumpla con su fin social”.

Sin embargo, dijo, se deben revisar las condiciones de seguridad de las emisoras comunitarias “porque quienes más las agreden son las autoridades locales, ya que éstas se resisten, de una manera impresionante, a abrir la información pública y sienten como una agresión personal el hecho de que se les pida transparencia en el manejo de los recursos”.

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