La Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados advirtió que el tema de las pensiones debe ser abordado cuanto antes como una prioridad de Estado y no buscar una salida insuficiente, ya que de lo contrario la problemática se heredará a nuevas generaciones con el riesgo de propiciar un gran impacto social.

El presidente del órgano legislativo, Miguel Ángel Navarro Quintero (PRD) señaló que al parecer, “México es el país de los pasivos, toda vez que la constante es la misma en el IMSS, en el ISSSTE, en Luz y Fuerza del Centro, en el ISSFAM y en la CFE. Grandes y preocupantes pasivos en pensiones”.

Durante una reunión de trabajo de la Comisión de Seguridad Social con el director de Finanzas de la Comisión Federal de Electricidad, Francisco Javier Santoyo Vargas, el diputado indicó que en nuestro país, el pago de las pensiones es completamente desigual, lo que genera inconformidad.

Esta situación, añadió, tenemos que abordarla a cabalidad y readecuar el marco normativo para lograr un equilibrio en todos los sistemas pensionarios.

“Los mexicanos reclaman tarifas pensionarias más justas por lo que debemos profundizar en el análisis para lograr equilibrios en todos los esquemas de nuestro país”, abundó.

En este sentido, refirió que se debe llevar al plano del equilibrio institucional y nacional todos los sistemas de pensiones, con la reflexión y disposición de todos los actores políticos, económicos y sociales.

Por su parte, el funcionario de la CFE destacó que el presupuesto asignado a la paraestatal es insuficiente para cubrir todas sus necesidades y abundó que tan sólo para el pago de servicios personales, pensiones y jubilaciones, se destina el 17 por ciento del total del presupuesto, lo que representa más de 39 mil 225 millones de pesos.

“28 mil 435 millones corresponde a la nómina del personal activo, mientras que 10 mil 789 millones son para el pago de pensiones y jubilaciones”, dijo.

Informó que el número de jubilados asciende a 28 mil 884, el cual tiene una participación en la nómina del 27.3 por ciento.

Mencionó que cada año la limitante de recursos plantea un nuevo reto para la CFE. Por un lado tiene que cumplir con sus metas de operación y, por otro, con sus obligaciones laborales.

Sin embargo, recordó que para el presente año se redujeron todavía más los recursos de la empresa, lo que genera una presión para fondear las pensiones.

Concluyó que el pasivo laboral a diciembre de 2007 ascendía a 241 mil 243 millones de pesos, 15.9 veces la nómina integrada anualizada de la CFE. “58 por ciento corresponde a trabajadores en activo y 42 por ciento a pensionados”.

-- ooOoo --