Es necesario castigar con pena de 3 a 6 años de prisión y multa de doscientos a cuatrocientos días de salario mínimo, a la persona que utilice el nombre de otra para sí, o cualquiera de los datos inherentes a su personalidad, para obtener un beneficio, plantea la diputada Patricia Villanueva Abraján (PRI).

Prevé a través de una iniciativa adicionar al Código Penal Federal un artículo 250 Bis, y un inciso 36 al artículo 194 del Código Federal de Procedimientos Penales, a efecto de que la usurpación de personalidad sea considera un delito grave.

Villanueva Abraján menciona que uno de los actos concurrentes de la delincuencia organizada, es el robo de personalidad, que tiende a defraudar financieramente a entidades bancarias, casas comerciales e incluso el patrimonio de los usuarios.

Para la obtención de los datos personales de un ciudadano basta con una llamada telefónica donde el delincuente se haga pasar por un ejecutivo de banco o cualquier otra empresa, con el objeto de verificar datos de un usuario, lo que también se obtiene a través de Internet.

Precisa la iniciativa que la usurpación de la personalidad se materializa cuando una persona usa el nombre, domicilio, nacionalidad y estado civil de otra, con un beneficio, que puede ser el acceso a un determinado lugar, ser parte de un acto contractual, así como obtener y ejercer un crédito financiero.

La diputada del PRI señala que el robo de identidad es un delito que se comete con más regularidad en los países donde el uso del Internet es el medio común para realizar transferencias, compras y pagar impuestos.

Expresa que de acuerdo a datos de la Asociación Mexicana de Internet, hasta 2007 existían 2.7 millones de usuarios, por lo que el país no está ajeno de este delito.

Añade que en 2004 se reportaron un total de 557 casos, según la Asociación Internacional para la Investigación de Fraudes Electrónicos; mientras que la Condusef, ha señalado que el 70 por ciento de las reclamaciones de tarjetas de crédito en México están relacionados con cargos indebidos.

Destaca que en Estados Unidos, cada cuatro segundos es robada una identidad y se afecta alrededor de 10 millones de personas por año, generando un perjuicio aproximado de 50 billones de dólares a los pasivos de este delito.

Patricia Villanueva agrega que la restauración de la identidad de una persona cuesta 8 mil dólares y se pierden 600 horas aproximadamente para realizar los trámites correspondientes.

Finaliza que la compañía de seguridad en Internet Symantec, estableció que en Estados Unidos se encuentran más de la mitad de los servidores de la economía ilegal que son utilizados para vender información confidencial y datos personales interceptados en la red.

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