La Comisión de Derechos Humanos se manifestó por la libertad religiosa, siempre y cuando sea otorgada con objetividad y sin ningún tipo de discriminación e intolerancia a quienes la profesen, ya sea en un espacio público o privado.

Al clausurar el Coloquio Libertad religiosa: prioridad de un derecho humano sobre las ideologías en el México plural, el diputado Antonio Sánchez Díaz de Rivera (PAN), propuso construir una reforma centrada en el derecho y libertad religiosa de todas las personas, así como en el respeto de pensamiento, creencia y manifestación.

Indicó que lo que se busca es un Estado laico que no sólo respete sino que promueva la libertad religiosa y permita la existencia de iglesias.

Precisó que también se debe tutelar, garantizar y promover la libertad religiosa en todas sus dimensiones: individual, colectiva, privada o pública. “Se dice que la religión pasó a ser el tabaco de los pueblos porque sólo a escondidas se realiza”.

La diputada Omeheira López Reyna (PAN), presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, dijo que como legislativo daráncontinuidad y seguimiento a las conclusiones, además de que se debe trabajar para que la tolerancia se inicie desde cada persona.

Rosario Ignacia Ortiz Magallón, del PRD, mencionó que el voto popular está dado sobre la plataforma de los partidos políticos y no de la religión que se profesa en un espacio público. Pidió a los que participan en la función pública desvincular su cargo de alguna creencia, sin dejar de creer.

Destacó que para garantizar cualquier libertad y derecho debe haber un Estado que no tenga religión “estatuida”, otorgando así laicidad. “La libertad religiosa de creencia y de conciencia que otorga el Estado tiene que ser objetiva para todos”.

El senador Federico Döring Casar (PAN), sostuvo que en México no hay libertad religiosa, pues en la Constitución Política no se establece la libertad de culto, sino sólo el concepto.

Cuestionó sobre a quién le conviene la existencia de candidatos lideres religiosos. Añadió que todavía esos no existen y que en todo caso le corresponde al Congreso esa reforma.

La presidenta del Comité del Centro de Estudios para el Adelanto de las Mujeres y la Equidad y Género, diputada María Soledad Limas Frescas (PAN) indicó que un país que pretenda ser moderno y vanguardista no puede negarle a nadie el derecho de libertad religiosa.

Señaló que México es un caso único en el mundo en cuanto a laicidad, por lo que en la Constitución Política se establece que el Congreso no puede prohibir religión alguna. “Dentro de los derechos del ser humano está su libertad religiosa”.

Diego García Richie, en representación del titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), indicó que nadie debe ser discriminado por motivo de su religión, y que el reto es definir los espacios públicos para que los individuos puedan ejercer su derecho humanocon total libertad.

El asesor de la primera visitaduría general de la CNDH, Gerardo Gil Valdivia expresó que la laicidad es un valor histórico para México, de ahí su importancia, además de que la ética debe ser considerada algo más que un quehacer público.

Rogelio Omar Chávez Moreno, subdirector de Educación Continua, de la CNDH, manifestó que es importante que los líderes religiosos puedan algún día ser electos para un cargo popular, pero sobre todo que los niños y niñas aprendan desde la infancia que tienen libertad religiosa.

Previamente, Liz Halabe, de la religión judía, indicó que los recintos religiosos no deben convertirse y mucho menos ser espacios de proselitismo político. Añadió que en un estado democrático debe existir el reconocimiento de los derechos humanos.

Efrén Velázquez, del culto anglicano indicó que es importante reconocer y respetar las leyes así como su acción. Agregó que se respeta el trabajo de los que gobiernan, pero el interés de los líderes religiosos no radica en tener más beneficios.

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