En caso de aprobarse la iniciativa de reforma petrolera propuesta por el Ejecutivo Federal, la paraestatal Petróleos Mexicanos pagaría cerca de un millón de dólares diarios por la renta de tecnología para la exploración en aguas profundas, con el riesgo de no encontrar grandes yacimientos, señaló el investigador del Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP), José de Jesús González Rodríguez.

Durante la mesa de discusión y análisis denominada: “Excedentes petroleros y desarrollo regional”, en la que participó el académico de la UNAM y asesor del grupo parlamentario del PRD, Carlos Huerta Durán, el investigador del CESOP destacó que existen más de 200 empresas contratistas y proveedoras para la exploración y explotación en aguas profundas, cuyo cobro en promedio es de 850 mil dólares diarios.

Aseveró que en el caso de nuestro país, las exploraciones podrían durar un mínimo de 9 meses, lo que significaría erogar cerca de 260 millones de dólares o más de dos mil 600 millones en su equivalente en pesos mexicanos.

Indicó que de acuerdo con otros investigadores, la certeza de que existan grandes yacimientos en aguas profundas en territorio mexicano no es del cien por ciento, no obstante, refirió que a nivel mundial se han descubierto 303 reservas con estas características, de las cuales, 172 son actualmente explotadas y otras 95 entrarán en operación próximamente.

Por otra parte, refirió que según encuestas en torno a la reforma petrolera, en junio de 2007 el 51 por ciento de los entrevistados se manifestó en contra de la participación de capital privado en la exploración de nuevos yacimientos, situación que se revirtió en febrero de 2008 cuando el 54 por ciento de los encuestados se pronunció a favor.

Añadió que la más reciente encuesta telefónica nacional, realizada el 12 de abril del presente año, arrojó que el 52 por ciento de los entrevistados consideraba que la reforma energética propuesta por el Ejecutivo Federal tenía un propósito privatizador, sin embargo, el 82 por ciento de esa misma encuesta dijo estar en contra de movilizaciones sociales pacíficas para impedir su aprobación.

“El 82 por ciento de los encuestados consideró que los diputados y senadores de los partidos de oposición deberían de discutir primero las reformas propuestas. El 9 por ciento aceptó que las manifestaciones pacíficas eran el único camino para detener las modificaciones y otro 9 por ciento no supo contestar”.

Por su parte, el académico Carlos Huerta Durán, aseguró que las cinco iniciativas enviadas por el Ejecutivo Federal al Congreso pretenden crear un mercado privado de la industria petrolera nacional.

Añadió que en el caso del petróleo crudo, de aprobarse las reformas, el sector privado tendría una actividad abierta del 62 por ciento contra un 31 por ciento de exclusividad para Pemex o el Estado, en tanto que el restante 8 por ciento sería de actividad mixta.

Lo mismo sucedería en materia de gas natural, dijo, donde el sector privado participaría en el 58 por ciento y Pemex en un 33 por ciento; la actividad mixta sería también del 8 por ciento.

Por lo que respecta a hidrocarburos naturales o petroquímicos básicos, abundó Huerta Durán, el sector privado tendría una participación abierta del 67 por ciento; Pemex el 25 por ciento y 8 por ciento la actividad compartida.

“En petrolíferos, que son productos que se obtienen mediante refinación del petróleo, el sector privado participaría con un 56 por ciento y Pemex con un 44 por ciento”.

Concluyó que al Ejecutivo Federal le hizo falta una propuesta para modificar el Régimen Fiscal de Pemex, toda vez que a nivel mundial, ocupa el primer lugar en contribución fiscal con 649 mil millones de pesos.

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