Ante las Comisiones de Educación Pública y de Asuntos Indígenas, la directora general del Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA), Rebeca Molina Freaner, afirmó que hay 33 millones de mexicanos en rezago educativo.

Explicó que de éstos, 6 millones de personas son analfabetas, 10 millones no han concluido la primaria y 17 millones no han ingresado o terminado la secundaria. Agregó que en el sector indígena se concentra el mayor número de personas, de 15 a 39 años, que no saben leer ni escribir.

Al comparecer conjuntamente con funcionarios de educación, Molina Freaner mencionó que el 34.5 por ciento de la población analfabeta es monolingüe, y que de este porcentaje, siete de cada diez son mujeres.

Al respecto, el diputado Marcos Matías Alonso, presidente de la Comisión de Asuntos Indígenas, aseveró que en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2009 se reducen en 60 por ciento los recursos destinados a la educación indígena, lo que “demuestra el tamaño de las prioridades del gobierno mexicano”.

Matías Alonso resaltó que el Poder Ejecutivo tiene que rendir cuentas sobre los avances de los Objetivos de desarrollo del Milenio, en el sentido de asegurar que en el año 2015, niños y niñas de todo el mundo puedan terminar un ciclo completo de enseñanza básica, acuerdo internacional ratificado por nuestro país, recordó.

Señaló que el rezago educativo de los pueblos indígenas, migrantes o adultos “seguirá siendo desalentador hasta que no se cumpla con este compromiso”.

En tanto, el diputado Sergio Sandoval Paredes (PRI) se pronunció por establecer “criterios certeros de evaluación educativa” para evitar confusiones en los indicadores: “El Presidente de la República afirma que en rezago educativo vamos muy bien, que hay avances considerables, pero cuando revisan los organismos internacionales nos colocan en los últimos lugares, ¿cuál es el criterio para evaluar, quién tiene la información precisa?, cuestionó.

Destacó la necesidad de articular los distintos programas del sistema educativo, así como los diferentes órdenes de gobierno para que la educación tenga dirección: “hay decisiones centrales en las que en muchas ocasiones los gobiernos estatales y municipales ni siquiera están enterados”.

Es importante que las instancias de gobierno no compitan entre sí y que se establezcan indicadores confiables que permitan presupuestar de acuerdo a las necesidades reales del sector: “si sólo trabajamos en función de la inercia de cada año no se logrará abatir el rezago”, advirtió.

Por su parte, el diputado Humberto Alonso Razo (PRD) manifestó que “es desgarrador” que en pleno siglo XXI se informe que el 31 por ciento de la población indígena es analfabeta.

Dijo que ellos han participado históricamente en la construcción de la nación mexicana y que, pese a esto, “los encontramos en el sótano del sistema educativo nacional”.

El legislador puntualizó que la educación debe dejar de ser una práctica integracionista y paternalista. Los programas deben diseñarse con base en la cosmovisión de los pueblos para fortalecer la identidad y pluriculturalidad de la nación, de lo contrario, añadió, “seguiremos en la orilla del precipicio que erradicará las culturas del país”.

En su intervención, el director general del Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe), Arturo Sáez Ferral, destacó que, de acuerdo con los resultados de la Prueba enlace los tres niveles que presentaron índices educativos muy bajos fueron las telesecundarias, educación indígena y cursos comunitarios que imparte la institución que dirige.

Precisó: “Estamos cien puntos abajo para alcanzar, por lo menos, el nivel elemental; ésta es la inequidad educativa que debe erradicar el Estado mexicano”.

Informó que el Conafe atiende el 60 por ciento de la demanda en educción básica en localidades con menos de 500 y 100 habitantes, donde hay entre cinco y 29 niños; para respaldar a las 22 mil localidades que faltan son necesarios recursos para estimular a los “promotores comunitarios”.

Agregó que en el ciclo escolar 2007-2008 se distribuyeron 4 millones 354 mil 952 de pesos en becas para educación básica y que para 2009 se tiene contemplado entregar 4 millones 354 mil 599.

En tanto, Rosalinda Morales Garza, directora general de Educación Indígena, se pronunció porque el presupuesto que se programe para 2009 sea mayor o igual al del año en curso.

“Necesitamos, por lo menos, 300 ó 500 millones de pesos para transformar las condiciones académicas y de operación de las instituciones encargadas de la educación autóctona, a fin de abatir el rezago imperante”, demandó.

Morales Garza argumentó que con el presupuesto asignado para este año se revirtió la tendencia negativa de los resultados de la Prueba enlace: “Mejoramos ocho puntos en matemáticas y trece en español”, especificó.

-- ooOoo --