La Comisión de la Función Pública aprobó el dictamen con punto de acuerdo por el que se solicita al director general de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), un informe sobre los trabajos que la empresa GUTSA realizó en la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

El informe debe especificar los montos asignados, tiempos de ejecución de las obras realizadas, así como las irregularidades que en su caso haya observado con motivo de la ejecución.

En el documento se menciona que de acuerdo a las observaciones emitidas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y señaladas en el Informe del Resultado de la Revisión y Fiscalización Superior de la Cuenta Pública de 2005, existen empresas particulares que no cumplieron en tiempo y forma con lo estipulado en los contratos firmados con ASA, entre ellas, la empresa GUTSA.

La ASF refiere que el contrato de obra pública número 311-O5-OF01-1º, del 7 de noviembre de 2005, tuvo por objeto realizar los trabajos de suministro, habilitado y montaje de estructura metálica de los edificios.

Dicho contrato fue adjudicado mediante licitación pública internacional el 7 de octubre de 2005, por conducto de la Gerencia de Administración de Proyectos a Administradora Gutsa, con un importe de 597 millones 452 mil 380.42 pesos y un periodo de ejecución de 304 días, que posteriormente fue reprogramado.
“La ASF constató que desde el inicio de la obra hasta la fecha en que se realizaron los recorridos, la empresa no realizó un adecuado manejo de los residuos peligrosos en su almacenamiento, transporte y disposición final, ni llevó a cabo el etiquetado de los contenedores y recipientes que los contenían”.

Añade que “tampoco dispuso sistemas de extinción contra incendios, ni señalamientos y letreros alusivos a la peligrosidad de los residuos peligrosos, en contravención con lo establecido en diversos artículos del Reglamento de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente”.
Además, no efectuó el mantenimiento preventivo periódico de todos los vehículos y maquinaria utilizada durante la construcción de la terminal 2.

“La empresa Gutsa incurrió en diversas omisiones en el cumplimiento de dicho contrato, que sin duda pone en riesgo la seguridad de los usuarios del AICM”, se lee en el documento.

Ante lo anterior, la Comisión enfatizó que las empresas que contratan con el Gobierno deben cumplir no sólo las obligaciones que se pactan en los contratos administrativos que suscriben con las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal, sino además con las disposiciones legales a las que se encuentran sujetas en virtud de las actividades que realizan.

Ante las irregularidades mencionadas, este órgano legislativo consideró necesario que ASA envíe un informe detallado, en el que no sólo se incluyan los montos y tiempos de ejecución de las obras, sino también si se detectó alguna irregularidad por parte de la empresa contratista.
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