• Aún es tiempo de hacerlo, aseguró

El paquete económico aprobado para 2009 requiere de una cirugía mayor, ya que debido a los efectos de la recesión mundial resulta a todas luces inviable, insostenible y ocasionará una baja de entre 10 y 15 por ciento en la captación fiscal, así como la pérdida de más de 5 mil millones de dólares por concepto de ingresos petroleros.

Así lo afirmó el diputado Cuauhtémoc Velasco Oliva, secretario de la Comisión de Energía e integrante de la Comisión Permanente, al subrayar que además es urgente una redistribución del gasto público, donde la prioridad sea erradicar el dispendio, los gastos superfluos y privilegios de que disfrutan los servidores públicos de los tres niveles de gobierno.

“Aún estamos a tiempo”, dijo, para realizar un replanteamiento de la Ley de Ingresos y del Presupuesto de Egresos, ya que fueron aprobados con tintes electoreros, no se buscó el bien de México y ello, aunado a los impactos negativos de la crisis, pone en riesgo el empleo, los ingresos y el nivel de vida de los sectores más vulnerables.

Explicó el legislador de Convergencia que para 2009 la recaudación de impuestos como el IVA, el IETU y el ISR tendrán una reducción de entre el 10 y 15 por ciento, por lo que si el gobierno esperaba captar un billón 161 mil 200 millones de pesos por esos tres impuestos, la pérdida de ingresos oscilará entre los 116 mil millones y los 174 mil millones de pesos.

Además, el “blindaje” al crudo mexicano por medio de coberturas, anunciado por Hacienda, sólo contempla 330 millones de barriles a 70 dólares, cuando en 2008 el total de las exportaciones fueron del orden de los 511 millones 730 mil barriles, por lo que 181 millones 730 mil barriles de crudo están fuera de dicho seguro y significarán una pérdida de 5 mil 451 millones de dólares.

Velasco Oliva subrayó también que los 538 mil empleos estimados en el paquete económico para 2009 “resultan una fantasía”, ya que analistas financieros consultados por el Banco de México pronostican que de diciembre de 2008 al mismo mes de 2009 sólo se crearán 81 mil plazas, lo que significa que 2009 “será uno de los peores años que México enfrentará en este renglón”.

Por si esto fuera poco, agregó, para 2009 se autorizó un “ofensivo y absurdo” aumento salarial de 4.6 por ciento, equivalente a 2 pesos 4 centavos diarios, mientras que los productos de la canasta básica han aumentado entre 19 y 43 por ciento en los últimos 30 meses, lo que nos muestra para este año un aumento de la pobreza y la pérdida del poder adquisitivo de las familias más necesitadas.

Adicionalmente a la redistribución del Presupuesto para amortiguar los efectos negativos de la recesión económica, Velasco Oliva consideró que el Gobierno federal y los poderes Legislativo y Judicial deben aplicar un programa de austeridad que considere la disminución del gasto corriente.

Debemos terminar, dijo, con el uso y abuso del gasto público a nivel federal, estatal y municipal en apoyo de las campañas electorales, gastos de representación, gastos médicos mayores, coches de lujo, viajes internacionales a placer, compensaciones, exenciones y privilegios fiscales, así como con la proliferación de elefantes blancos y el aumento desmedido de corruptelas en las adquisiciones y obras públicas.

Velasco Oliva estimó que los recursos que resulten de estas medidas deben ser destinados al fomento de la actividad económica, a la construcción de infraestructura que promueva el empleo, al fortalecimiento de la pequeña y mediana empresa que genera el 96 por ciento de las fuentes de trabajo en el país y a la consolidación de programas sociales, más allá de lo acordado a favor de la economía familiar.
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