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Boletín N°. 3634 Debe aumentar 6.91 por ciento el salario, más la inflación estimada, para recuperar su poder adquisitivo

Para mantener constante el poder de compra del salario mínimo general durante este año, su incremento debería ser del 6.91 por ciento más la inflación estimada en el presente año, que es del 3.8 por ciento, de esta manera, se recuperaría su pérdida acumulada desde enero del 2006.

En un estudio elaborado por el Centro de Documentación, Información y Análisis, de la Cámara de Diputados, se agrega que de enero de 2006 a diciembre del 2008 la pérdida del poder adquisitivo de las familias con los ingresos más bajos del país fue de 6.91 por ciento.

El poder adquisitivo se define como la capacidad de compra de bienes y servicios que tienen los individuos a través de los sueldos que perciben. La pérdida de este poder se presenta cuando el incremento del nivel general de precios es superior al aumento en los salarios; lo contrario implica su fortalecimiento.

En el documento se menciona que en el periodo de referencia, el salario medio de cotización del IMSS aumentó 17.42 por ciento, mientras que el nivel general de precios lo hizo solamente 15.01 por ciento. En este sentido, el poder adquisitivo aumentó en 2.41 por ciento.

Sin embargo, en este mismo periodo el salario mínimo general se incrementó sólo 8.10 por ciento y el nivel general de precios aumento 15.01 puntos porcentuales. Como consecuencia, la pérdida del poder de compra de los hogares con los ingresos más bajos fue de 6.91 por ciento, sostiene el investigador parlamentario Reyes Tépach M.
“En la actual coyuntura, el incremento de los precios de los alimentos es superior al de los salarios, sin embargo, los otros rubros que componen el gasto familiar presentaron un incremento inferior al registrado por los comestibles, lo que llevó al nivel general de precios a mantenerse por debajo del incremento de los salarios”, explica el investigador.

Enfatiza: “bajo estas circunstancias se concluye que el salario mínimo general ha perdido poder de compra frente al conjunto de bienes y servicios que integran la cesta de consumo”.

El incremento acumulado de los precios de los alimentos se estimó en 24.86 por ciento, mientras que, el aumento acumulado del nivel general de precios fue de 15.01%. Esto afectó principalmente a los hogares con los estratos de ingresos más bajos (los que perciben hasta 3 salarios mínimos), añade.

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