• Evitemos salidas violentas: investigador Francisco Ramírez

A fin de elevar la calidad de vida de los campesinos mexicanos y, a su vez, fortalecer el desarrollo rural, mediante una estrategia integral de combate a la pobreza, la Comisión de la Reforma Agraria prepara un dictamen para impulsar una nueva ley del sector, informó el diputado Ramón Ceja Romero (PAN), presidente de ese órgano legislativo.

“Si esto era necesario hace unos años, es imperativo ahora con la profundización de la crisis nacional, derivada de la problemática financiera internacional; por los efectos que ésta ha generado en el campo, es urgente incrementar la producción de alimentos y reposicionar el campo en la economía”, sentenció.

Explicó que las reformas buscan aplicar y fomentar la organización social en el sector agrario; se definan, amplíen y profundicen los alcances de las sociedades y de las asociaciones agrarias como sujetos promotores del desarrollo.

Precisó que de esa manera se incrementarán algunas asociaciones con personalidad jurídica y patrimonio propio, como la Unidad Agrícola Industrial de la Mujer Campesina.

También se establecerán responsabilidades de la Secretaría de la Reforma Agraria y otras entidades en la promoción, organización, capacitación y el financiamiento con fines productivos.

Comentó que “sin pretender ser la solución a la crisis del país”, buscan aportar elementos consensados entre los grupos parlamentarios representados en la Cámara de Diputados y “así contribuir a mejorar las condiciones de vida de los campesinos mexicanos”.

Durante la presentación del libro Armonización de los Movimientos Campesinos en México (1990-2007) el legislador destacó que a través de la pluralidad, el diálogo y el intercambio ideológico, la comisión a su cargo trabaja para la actualización del marco jurídico que regula al campo, a fin de crear mecanismos que desarrollen de manera óptima al sector.

En su oportunidad, el presidente de la Comisión Especial de Seguimiento a los Fondos Aportados por los Trabajadores Mexicanos Braceros, diputado Isidro Pedraza Chávez, dijo que se requiere un proyecto de fomento agropecuario que promueva la productividad agraria a mediano y largo plazo que implemente un proyecto nacionalista y democrático.

“La sociedad rural debe ser libre, porque en la medida que haya libertad para poseer tierras, habrá libertad económica e independencia para decidir políticamente el rumbo del país”.

Es trascendental, agregó, encontrar alternativas para caminar hacia una nueva estructura de Gobierno, en donde realmente se puedan dar estos pasos fundamentales para revertir la crisis rural; desarrollar el mercado interno que promueva la productividad agraria a corto y mediano plazos.

A su vez, Francisco Ramírez Díaz, autor del libro, reconoció que existe una dependencia de la crisis nacional respecto de la agraria, “por tal motivo, mientras no se resuelvan los conflictos internos no se podrá aspirar a salir de la problemática financiera que atraviesa el país”.

Precisó que la crisis de la rama agropecuaria sólo tiene solución en el estímulo y fomento a la producción y, particularmente, de la pequeña producción mercantil. Cualquier solución ajena a estas exigencias sociales únicamente agrava la desestructuración económica y alimenta la tendencia hacia la salida violenta.

Enfatizó que para lograr una salida por la vía pasiva, “entendiéndose ésta como el camino institucional”, primero se deben limitar los poderes del Ejecutivo en materia del control de la administración pública, lo que en los hechos significa transitar e instaurar un sistema de gobierno parlamentario.

“También impulsar el fortalecimiento del mercado que reconozca el valor del trabajo como la fuente fundamental de la riqueza social. Por último, que su eje se fundamente en un propósito de desarrollo rural, cuyo objetivo sea la reconstrucción del tejido productivo y social para impulsar la producción pecuaria, silvícola y pesquera”, acotó.

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