Al conmemorar el CCIII aniversario del natalicio de Benito Juárez García, diputados de las diversas fracciones parlamentarias consideraron necesario rescatar su legado en torno a la separación Estado-Iglesia, la justicia social, el respeto a la diversidad ideológica, la tolerancia entre los pueblos, a fin de revertir los problemas de inseguridad y pobreza que enfrenta la nación.

PAN

En tribuna, la diputada María Isabel Reyes García dijo que los principios plasmados en las Leyes de Reforma impulsadas por Benito Juárez siguen vigentes hasta ahora, “siguen siendo aplicables porque son universales; las cuales no hemos podido emular al 100 por ciento. Hemos crecido y nos hemos modernizado, pero aún no hemos podido acortar la distancia entre los trabajadores y los dueños del capital”.

Resaltó que la más importante herencia de Benito Juárez es, sin duda, las Leyes de Reforma, que constituyen la consolidación de la vida institucional de México.

“Dio ejemplo de cómo se puede vivir en el gobierno, nosotros asumimos ese compromiso; respetamos y valoramos su ejemplo de servicio, mismo que tratamos de emular y vivir cada día. Sobre todo, ahora que se estudia en esta Cámara una norma que regule los salarios de los servidores públicos”.

PRD

Al fijar la postura de su fracción parlamentaria, el diputado Joaquín Conrado de los Santos Molina argumentó que a más de dos siglos del nacimiento de Benito Juárez, las condiciones del país no han evolucionado, “sigue existiendo la inequidad y el olvido para los pueblos pobres, principalmente para su estado: Oaxaca”.

Es tiempo de retomar esos ideales y defender nuestra soberanía; es ahora cuando más debemos tener presente su legado para implementarlo en la defensa de los intereses de México y de sus instituciones, así como tener la resolución y la determinación para hacer los cambios y las reformas necesarias.

“La separación de las funciones Iglesia y Estado fue una acción determinante para que el país se convirtiera en una nación moderna, así pudo cimentar un proyecto de nación sustentado con reglas claras y principios federalistas”.

PRI

Más adelante, el diputado Daniel Gurrión Matías manifestó que las ideas liberales de la ciudadanía, la preeminencia de la ley, la clara separación entre el Estado y la Iglesia, la igualdad plena entre hombres y mujeres libres, son algunos de los preceptos que el “Benemérito de las Américas” dejó como legado.

Abundó que la mejor forma de conmemorarlo es reafirmando los principios y valores fundamentales de nuestra sociedad. “Principios como la libertad, el respeto y la justicia que requieren sustentar los fines últimos de los momentos de cambio por los que transitamos en muchas materias, trátese de la transformación del Estado, de la reforma hacendaria o de la reforma social”.

No existe, continuó, mejor manera de celebrar el natalicio de Benito Juárez que intensificando la lucha por un México sin fueros ni privilegios, sin abusos ni corrupción, sin millones de excluidos; en donde no haya tan pocos mexicanos con tantos derechos y prerrogativas, y tantos carentes de lo elemental.

Convergencia

El diputado José Francisco Melo Velázquez advirtió que su obra e ideario están presentes en quienes advierten claramente que el país está en riesgo, “México continúa en su histórico estancamiento económico, el peso se ha devaluado 28 por ciento durante esta administración; la deuda pública se ha elevado de 700 a dos mil 200 millones de pesos, en sólo 8 años”.

El legislador se pronunció por transformar el actual sistema político, porque “no podemos seguir tolerando la vigencia de un Gobierno rico con un pueblo pobre, de un sistema de privilegios y derroche de recursos”.

PVEM

A su vez, el diputado Pascual Bellizzia Rosique dijo que Benito Juárez luchó por encauzar el desarrollo del país a través del orden, la paz y el respeto a la ley, con el propósito de dar fin a las desigualdades sociales. “Sigamos su ejemplo para hacer frente a la realidad social y económica que vive el país, en el que prevalece el desempleo, la pobreza, la desigualdad, la inseguridad pública y la presencia de la delincuencia organizada”.

Enfatizó que como representantes populares tienen la obligación de encontrar, conjuntamente con el Poder Ejecutivo, “las soluciones a los grandes problemas que enfrenta la nación”.

PT

La diputada Rosa Elia Romero Guzmán externó que el pensamiento de Benito Juárez está indisolublemente ligado a la esencia del Estado y de la sociedad mexicana. “Claro ejemplo es la Ley Juárez, que señala a todos los ciudadanos iguales ante la ley, sentando las bases para construir una sociedad civil”.

Destacó que la austeridad en la que se desenvolvió bajo su apotegma de disponerse a vivir en la honrada medianía, que proporciona la retribución que la ley señala, cobra importancia en la actualidad, “cuando en esta soberanía se debate la Ley de Salarios Máximos, a la que se deben ajustar todos los funcionarios públicos, hayan sido o no electos popularmente”.

Nueva Alianza

En su oportunidad, la diputada Irma Piñeyro Arias expresó que las circunstancias que caracterizan a nuestro tiempo son muy distintas a las que enfrentó Benito Juárez, “muestra de ello es la incertidumbre social, derivada de la incapacidad del Estado, ante los efectos negativos de la crisis global y la inseguridad que se vive en todo el país, por el combate al crimen organizado”.

Precisó que México no puede seguir siendo vulnerado por la pobreza, la violencia y la inseguridad. “Nuestro principal reto es cerrar las brechas de la desigualdad y la intolerancia. El Estado debe ser garante del orden y la legalidad, ya que sólo en la observancia y en la aplicación irrestricta de la ley se puede mantener la seguridad pública y la tranquilidad social”.

Alternativa

La diputada Elsa Conde Rodríguez aseguró que rememorar el natalicio de Benito Juárez es ocasión propicia para recordar la importancia de fortalecer al Estado laico. “Éste tiene la obligación de velar por el equilibrio entre los principios esenciales que favorecen el respeto de la diversidad y la integración de toda las ideologías en la esfera pública”.

Recalcó que la existencia del Estado laico es una exigencia de las sociedades modernas y democráticas. “Existe una creciente diversidad religiosa y moral; ante ello, los Estados tienen ante sí desafíos cotidianos para favorecer la convivencia armoniosa, así como la obligación de favorecer por diversos medios la deliberación democrática y pacífica”.

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