• Presentó, junto con el diputado César Duarte, una iniciativa que transformaría a la SRA

México no puede continuar siendo un país importador de alimentos, sobre todo cuando existen enormes espacios de producción; ante dicha situación se requiere una nueva Ley Agraria integral que apoye verdaderamente a los millones de campesinos que actualmente viven marginados, afirmó el diputado Alfredo Ríos Camarena.

Al referirse a las reformas a la Ley Agraria, impulsadas conjuntamente con el diputado César Duarte, presidente de la Mesa Directiva, el legislador aseguró que hoy en día el campo está en ruinas porque se desmanteló toda la instrumentación que el país tenía para la producción rural; por ello, urgió al Congreso a revisar el actual marco legal y actualizarlo a las demandas sociales.

Explicó que las modificaciones al sistema jurídico vigente buscan transformar la Secretaría de Reforma Agraria en una Secretaría de Reforma Agraria y Desarrollo Rural, con lo que se pretende darle un nuevo rumbo al manejo del presupuesto.

“Agricultura ha manejado el presupuesto mal, ahí está la prueba de los subejercicios, no ha atendido a los propietarios sociales. El campo está, repito, abandonado, los ejidos están rentados o se venden al margen de la ley”, advirtió.

Ríos Camarena expuso que las reformas a la actual Ley Agraria, que data de 1992, se han trabajado por más de tres años, porque se veía con criterios y propuestas muy importantes de transformación.

Abundó que a lo largo de la LX Legislatura se fue consolidando una propuesta de iniciativa bastante amplia que hoy viene a generar una condición al ejido, a la propiedad comunal, en el reconocimiento en una manera transparente para el manejo de sus órganos de gobierno.

Informó que mediante el diálogo se concretaron consensos con diputados del PAN, del PRD y con los de otras fracciones parlamentarias; además, esta ley es producto de un acuerdo con el Tribunal Superior Agrario.

Agregó que con las modificaciones también se busca concretar que la propiedad social tenga la capacidad de garantizar el crédito, que exista una responsabilidad con un perfil empresarial, que los órganos de gobierno, de representación de la propiedad social, tengan la obligación de presentar cuentas simple y sencillamente, para así darle un sentido de competencia y competitividad.

El diputado dijo que desafortunadamente a nadie le importa la propiedad social de la tierra, “parece ser un tema casi vetado”. Añadió que no se dan cuenta que parte de la crisis económica, quizás la más importante, es la falta de capacidad de soberanía alimentaria de un país.

Ante ello, continuó, la reforma que se propone solamente es para dejar el testimonio de un grupo de diputadas y diputados de todos los partidos que hicieron un esfuerzo y que creemos fructificará en la próxima legislatura.

-- ooOoo --