Con el propósito de evitar que la publicidad comercial incorpore en artículos de consumo masivo, como alimentos y bebidas, calcomanías adheribles que sirvan para que niños y jóvenes simulen tatuajes en sus cuerpos, el diputado David Hernández Pérez (PRI) presentó una iniciativa que pretende reformar la Ley General de Salud.

El legislador explicó que estos cambios buscan aplicar sanciones administrativas y económicas a quienes introduzcan, adhieran o adjunten promocionales a los productos de consumo humano.

Dijo que también se pretende penar, con sanciones que la autoridad reguladora imponga, a empresas o particulares que se encarguen de su distribución y venta.

“La publicidad posee una poderosa fuerza de persuasión, modeladora de actitudes y comportamientos en el mundo actual. Del análisis actualizado de esta ley resulta que no precisa las medidas para el control de los productos, ya que no prohíbe que se incluyan o agreguen calcomanías o tatuajes en forma promocional”.

Manifestó que éste es un tema complejo porque además de las consecuencias sociales, familiares, educativas, culturales y psicológicas que conlleva a quienes las portan implica, a futuro, efectos jurídicos y de tipo laboral.

Asimismo, expresó que en los últimos años el entorno familiar, educativo, social y cultural en que se desarrollan niños y adolecentes ha cambiado, por lo que se debe de pugnar porque prevalezcan los valores de la persona humana, como su libertad, respeto y dignidad.

En este sentido, resaltó que el afán mercantil desmedido de empresas, “que con su publicidad y mercadotecnia envuelven y atraen a los incautos consumidores, en infinidad de productos chatarra, ha incitado a niños y jóvenes a colocarse signos e imágenes en las diferentes partes del cuerpo, distorsionando su conducta respecto al cuidado y aprecio de su aspecto físico”.

Advirtió que estos productos se venden no sólo en expendios de alimentos sino también en centros educativos. “Estas prácticas a temprana edad constituirán un referente que motivará el uso de tatuajes definitivos que marcaran permanentemente sus cuerpos en forma general y reiterada”.

“Es preocupante el deterioro que registran los valores de la sociedad contemporánea, que fundamentalmente repercuten en la infancia y en la juventud del país”.

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