La violencia intrafamiliar, psicológica o física, embarazos de adolescentes, el sida, el alcoholismo y la drogadicción, son factores que ponen a las familias al borde de la desintegración, afirmaron estudiantes de secundaria en el segundo día del Tercer Congreso de los Jóvenes.

Para que las relaciones familiares sean buenas, los integrantes deben tener algo en común porque los conflictos son producidos por falta de similitud en la forma de pensar, indicó Daniel Alejandro Marquéz Jiménez, estudiante de la escuela secundaria técnica no.66, Francisco J. Mújica.

Durante su participación en el evento organizado por la Cámara de Diputados, el joven estudiante dijo que uno de los problemas que más afectan a los adolescentes es la falta de una comunicación amplia y confianza entre los padres e hijos, para hablar de educación sexual, drogadicción o alcoholismo.

Aseguró que para lograr un cambio en la sociedad, se requiere de la participación de toda la sociedad: profesores, alumnos, padres y medios de comunicación.

"Consideramos que faltan más campañas de concientización acerca de la comunicación familiar, para que las generaciones que vienen se sientan motivadas a resolver los problemas de su familia, comunidad y sociedad y no huir de ella", añadió.

También dijo que la sociedad es tan cambiante que la creación de leyes o las soluciones que aporten los legisladores no son suficientes.

Durante el Tercer Congreso de los Jóvenes se instalaron ocho mesas de trabajo, en las que se señaló la necesidad de rescatar la herencia cultural y desarrollar el sentimiento nacionalista en la familia, para no cambiarla por identidades del exterior.

DJ/JGM