Palacio Legislativo 14-III-2010 (Notilegis).- El consumo de bebidas “energizantes” se ha incrementado y representa un riesgo para la salud, principalmente entre los jóvenes, quienes las combinan con alcohol y ponen en riesgo su vida, por lo que la Secretaría de Salud y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), deben evaluar estos productos y negar su distribución y comercialización.

Aseguró lo anterior la diputada Leticia Quezada Contreras (PRD), quien presentó un punto de acuerdo por el que exhorta a ambas instancias federales lleven a cabo los estudios necesarios para determinar el riesgo para la salud de los consumidores de las denominadas "bebidas energizantes", así como las consecuencias a la salud.

Quezada Contreras también solicitó a dicha dependencias llevar a cabo la evaluación para que sea negada la distribución y comercialización de las bebidas energizantes en bares y discotecas, con la finalidad de que no sean consumidas con alcohol, así como garantizar su distribución, ya que muchas de éstas entran por las aduanas y no hay un control claro.

La diputada del PRD informó que hasta un 60 por ciento de los jóvenes, entre los 16 y 30 años de edad, son quienes más ingieren estas bebidas y las combinan con el alcohol.

“Hay una preocupación grave, puesto que estas bebidas estimulan el sistema nervioso y combinadas con el alcohol lo deprimen, causando shocks y accidentes viales, inclusive pueden llevar a un paro cardiaco, situación que se está registrando ya en muchos hospitales de nuestro país”, subrayó.

En ese sentido, comunicó que en algunos países como Noruega, Francia y Dinamarca han restringido la venta, no solamente en farmacias, sino que se han prohibido en lugares en los que se venden bebidas alcohólicas y a menores de edad.

Leticia Quezada destacó que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y la Cofepris han llevado a cabo algunas acciones, pero mínimas, para difundir los posibles riesgos que implican el consumo de estas bebidas en los adolescentes.

La legisladora enfatizó que estas bebidas son estimulantes y aunque inicialmente fueron utilizadas por deportistas, actualmente su consumo se ha popularizado entre la sociedad, quienes las toman para mantenerse despiertos, ya sea “para prepararse para un examen o simplemente para estar despiertos durante la noche”.

Por lo anterior, comentó que en nuestro país se venden en diversas presentaciones, precio y contenido, desde los 250 mililitros hasta más de medio litro por unidad, ya que entre las supuestas ventajas que ofrecen estas bebidas, se encuentran: la revitalización y recarga de energía.

Der acuerdo a un estudio de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) el consumo entre los jóvenes es de hasta 2.5 litros en una salida a un baro o discoteca.

El documento realizado por la Cofepris señala la importancia de evitar ese tipo de combinaciones que pueden ser causa de accidentes y dependencia del alcohol. Además, la ingesta excesiva también puede ocasionar intoxicación y otros males como ansiedad y taquicardia.

Asimismo, explica que la cafeína contenida en las bebidas energéticas, más los efectos depresores del alcohol y las distinta susceptibilidad de las personas genera una falsa sensación de bienestar, sin embargo, pierden reflejos y movilidad.

El estudio indica que actualmente están disponibles más de 50 marcas comerciales en diferentes presentaciones, que van desde los 250 mililitros hasta más de medio litro por envase.

Por lo anterior y con la finalidad de regular y limitar el contenido de cafeína en este tipo de bebidas, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) continúa los trabajos del comité encargado de la reforma a la Norma Oficial Mexicana 218, de productos y servicios, sobre bebidas saborizadas no alcoholizadas, sus congelados, y productos concentrados para prepararlas.

Se establecerá un límite máximo de cafeína en las bebidas energizantes, a fin de que no rebasen los 33 miligramos por 100 mililitros de líquido. Es decir que un envase de 250 mililitros se limitará a 82 miligramos de cafeína. Actualmente estos productos se elaboran con entre 108 y 382 miligramos de cafeína por cada 100 mililitros.

AILH