Palacio Legislativo 26-VI-2010 (Notilegis).- Diputados de la Comisión Especial de la Industria Automotriz coinciden en la necesidad de impulsar un programa para la renovación del parque vehicular a nivel nacional, toda vez que a partir del 2005 han entrado al país cerca de 4.8 millones de autos usados que tienen carencias físico-mecánicas que hacen que excedan los niveles de emisiones contaminantes.

Los legisladores se comprometieron a analizar la problemática y presentar iniciativas para conformar un proyecto de ley que tenga en cuenta la renovación vehicular a nivel nacional para sustituir todas aquellas unidades que excedan el límite de emisión de contaminantes y tengan una antigüedad considerable.

En reunión de trabajo, el presidente de la instancia legislativa, Melchor Sánchez de la Fuente (PRI), propuso a los integrantes de la comisión analizar la renovación vehicular que se ha llevado a cabo en países como: Alemania, España y Brasil para poder implementar en nuestro país ese tipo de programas que detonan el mercado interno.

En su intervención, el coordinador del Partido Verde (PVEM) e integrante de la comisión, Juan José Guerra Abud, propuso establecer un incentivo fiscal a las empresas automotrices que se encarguen de chatarrizar las unidades, es decir por cada auto destruido emitirán un certificado que podrán utilizarlo como deducible fiscal.

Además de que se establezca un fondo en el Gobierno federal para canjear autos viejos por un monto a definir, que sea utilizado y descontado del total del valor de un automóvil nuevo en las compañías automotrices que participen en el programa. En este tema es importante señalar que desde hace 12 meses presentan resultados decrecientes en sus ventas y han reducido su producción, afectando las fuentes de trabajo que tienen.

“El problema de entrada de los autos usados no sólo es un factor negativo para el ecosistema, lo es también para la industria nacional, el empleo y la seguridad de los usuarios”, dijo Sánchez de la Fuente.

Cabe señalar que a partir del 22 de agosto del 2005, el Ejecutivo federal autorizó la importación de vehículos usados procedentes de Estados Unidos y Canadá, que se estableció en el Tratado de Libre Comercio (TLC), sin que se fijaran las disposiciones normativas y la infraestructura para verificar la calidad de los vehículos en materia de emisiones de contaminantes y de condiciones mecánicas necesarias para su operación segura.

Lo cual ha incrementado el número de unidades vehiculares con varios años de antigüedad que no tienen las condiciones necesarias para circular en el país y contribuyen a que los índices de ozono se eleven de manera alarmante causando contingencias ambientales en la zona metropolitana del Valle de México y por consiguiente afectando la calidad del aire.

En reunión de trabajo, los legisladores conocieron un informe de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), que señala que en el año 2007, el 7 por ciento de los accidentes automovilísticos registrados se debió a fallas del automóvil atribuidas, según peritos, al escaso mantenimiento que se les brinda a vehículos de edad avanzada, mientras que para el 2009 ese índice se incrementó a un 11 por ciento.

Ese escaso mantenimiento de los vehículos antiguos ha ocasionado un incremento en las estadísticas causales de accidentes. Las principales fallas citadas por peritos de la secretaría de Seguridad Pública (SSP) son fallas en neumáticos, frenos, dirección y luces. Los legisladores acordaron que en el siguiente periodo de sesiones, que inicia en septiembre ya estén las bases de ese proyecto de ley y que antes de que concluya ese periodo se pueda aprobar.

ALR