Palacio Legislativo 20-07-2012 (Notilegis).- Luego de que expertos aseguran que los sindicatos son el principal obstáculo para la reforma laboral, el integrante de la Comisión de Trabajo y Previsión Social, Armando Neyra Chávez (PRI), negó que dichas asociaciones hayan sido el único impedimento para la aprobación de esta iniciativa, al tiempo que señaló que hubo falta de consenso entre los empresarios y dirigencias sindicales, lo que provocó que la reforma laboral no prosperara en esta Legislatura.

“Los sindicatos no fueron un obstáculo, los sindicatos somos los propios trabajadores quienes nombramos a varios compañeros que los hacemos dirigentes del sindicato a donde ellos pertenecen, entonces le consta a Acción Nacional que no hubo consenso, ni de especialistas en la materia, ni de talentos universitarios, no hubo consenso para sacar un dictamen, ese es el estado que guarda la ley”, recordó.

Neyra Chávez adelantó que si existiera un periodo extraordinario para analizar la aprobación de una reforma laboral, el primer proyecto en la materia sería rechazado debido a la falta de consenso, aunado a la falta de tiempo, otro factor que impide la aprobación de esta reforma, dijo.

Sin embargo, no descartó que al principio de la LXII Legislatura, la reforma laboral sea uno de los primeros temas a tratar. “Los tiempos ya los tenemos encima y yo creo que a partir del primero de septiembre se hablará de una nueva política laboral”, señaló.

En tanto, la secretaria de la Comisión de Trabajo y Previsión Social, Nancy González Ulloa (PAN), consideró que los sindicatos sí fueron uno de los principales obstáculos para la aprobación de la reforma laboral.

“Estábamos en elecciones y los sindicatos no la estaban apoyando, por lo que tal vez Peña Nieto supuso que su aprobación no ayudaría a su campaña, por eso le estamos apostando que ya que pasó la campaña esperamos que cumpla su compromiso con una reforma laboral que generé empleos”, comentó.

González Ulloa consideró inviable que en un periodo extraordinario pueda ser analizada una reforma laboral, ya que no existe el dictamen necesario para su estudio.

El vicecoordinador del grupo parlamentario del PRD, José Luis Jaime Correa aclaró: “los sindicatos, más que un obstáculo son instituciones que están pensando ser consultadas, así es que no hay que pensar que la reforma laboral es una ley que todo lo resuelve, más bien como la están pensando es una ley que todo lo perjudica”.

Por lo anterior, recalcó que la suspensión de la aprobación de la reforma laboral fue debido a que sólo contemplaba las opiniones de las bancadas parlamentarias del PRI y PAN sin las opiniones de todos los sectores de la sociedad.

El legislador consideró inviable que la reforma laboral se analice y se apruebe en un extraordinario, debido a que hay temas de coyuntura más importantes. Además, advirtió que un intento de albazo para aprobarla entre el PRI y el PAN lo único que generaría sería una amplia respuesta social de rechazo, porque sería una imposición de una reforma restrictiva de los derechos de los trabajadores.

ASC