Palacio Legislativo, 11-08-2013 (Notlegis).- Quienes quieren modificar la Constitución en el marco de la reforma energética “lo que buscan es apropiarse de parte de la renta petrolera, a través de las concesiones”, afirmó el vicecoordinador de los diputados del PRD, Miguel Alonso Raya.

“No debemos ceder a las presiones para que los hidrocarburos dejen de ser propiedad de la nación”, indicó en un comunicado.

Señaló que el sector energético sigue siendo la columna vertebral de la economía nacional y dijo que Petróleos Mexicanos (Pemex) aporta el 35 por ciento de los ingresos federales y entrega vía impuestos al gobierno federal el 70 por ciento de sus ganancias.

Reconoció que esta empresa enfrenta problemas a partir del régimen fiscal a que está sometido.

Pemex padece corrupción y saqueo, tiene una burocracia abultada y es víctima de la delincuencia organizada, además de enfrentar problemas estructurales por los excesos del contrato colectivo con su sindicato que repercuten en su pasivo laboral, agregó.

Frente a este escenario, Alonso Raya reconoció que se requiere de decisiones drásticas, “pero para que (la paraestatal) siga produciendo para la nación y lo primero es sanearla de corrupción en todos los sentidos y en todos los ámbitos y liberarlo de recursos de los que produce para que pueda invertir”.

Reiteró la posición del PRD de que Pemex es una empresa sumamente rentable, que cuenta con los recursos para invertir en tecnología, exploración, refinerías y toda su cadena productiva.

“La ruta no es ni puede ser la de la privatización de Pemex y el sector energético nacional, sino la de su fortalecimiento y rescate en el marco de lo que establece nuestra Constitución y el espíritu de la expropiación petrolera de 1938”, aseguro el diputado perredista.

Alonso Raya argumentó que una eventual reforma energética debe plantear reducir los precios de la energía en el país, no elevarlos como es la tendencia actual.

Se pronunció por dotar a Pemex de autonomía presupuestaria y de gestión, cambiar su régimen fiscal, combatir a fondo la corrupción, invertir en tecnología, construir capacidad de refinación y reducir las importaciones.

También señaló la necesidad de canalizar recursos en exploración para restituir las reservas nacionales y en refinerías, para reducir importaciones y los precios de los combustibles.

“El cambio en el régimen fiscal de Pemex debe llevar también a reformar la estructura y el esquema fiscal del país, se debe elevar la recaudación con una visión progresiva y redistributiva, sobre la base de eliminar los regímenes preferenciales, reducir la evasión, pero no castigando el consumo, en especial, con el incremento de la tasa del IVA y su cobro en medicinas y alimentos”, concluyó.

JGM