Palacio Legislativo 30-09-2013 (Notilegis).- La violencia en mujeres, jóvenes y niños es un problema multifactorial que requiere la construcción y articulación de políticas públicas que incidan en una verdadera transformación en el país, afirmó el coordinador del PRD, Silvano Aureoles Conejo.

El origen de estas conductas violentas tiene que ver con aspectos estructurales y culturales, por lo que es indispensable impulsar un cambio y no “solamente hacer las leyes”, indicó al inaugurar el foro “Violencia de Género, Juventud y Escuelas en México, Situación Actual y Propuestas para su Prevención”.

Dijo que “es criminal el abandono y la falta de una política pública que favorezca la real integración de los jóvenes al desarrollo nacional” y se pronunció por “buscar, desde todos los ángulos y por todos los medios, que se elimine la violencia”.

Estamos “obligados a hacer lo que nos toque para contribuir al cambio cultural y estructural que sigue viviendo la niñez y la juventud”, agregó el diputado perredista.

Las mesas de trabajo del foro de dos días, que se lleva a cabo en San Lázaro, abordan temas como, “Efectos de la violencia en la niñez y adolescencia en México; una mirada desde la Psicotraumatología” y “El problema de la violencia juvenil y su relación con la salud mental”.

Entre otros aspectos también se analiza “La violencia de género en estudiantes”, así como “La violación de los derechos reproductivos de las jóvenes”.

La diputada Margarita Elena Tapia Fonllem (PRD), organizadora del evento, afirmó que la información y el conocimiento no serán suficientes para frenar la violencia, si no se traducen en políticas públicas que den solución al problema.

La también secretaria de la Comisión de Derechos Humanos, destacó que la inversión en el sector juvenil debe ser una prioridad para erradicar la violencia y que no se replique en su entorno, para garantizar una vida mejor.

Dijo que el objetivo del foro es crear un espacio de reflexión sobre las formas en que el Estado mexicano ha marginado a las y los jóvenes de los mecanismos básicos de inclusión social.

El diputado Aureoles Conejo consideró que “no es justo que en este país se haya concentrado la riqueza en un 10 por ciento de la población nacional y que el 1.7 sea quien tenga los beneficios de los bienes públicos”, lo cual ha afectado al sector juvenil en su desarrollo.

“Los jóvenes han sido los más afectados por ello, inmersos en problemas de abandono, marginación, dificultad de acceso a la información a un empleo, y en consecuencia, el alto nivel de involucramiento de este sector en la violencia y acaban siendo los llamados “jóvenes desechables”, reflexionó.

Se preguntó “cómo no van a nutrirse las bandas de la delincuencia si tenemos cerca de 10 millones de jóvenes sin empleo, sin educación, y viviendo problemas severos de desintegración familiar donde también hay violencia”.

El doctor Alfredo Nateras, de la Universidad Autónoma Metropolitana, consideró como fundamental la “ciudadanización” de los institutos dedicados a la juventud, para que ese sector se involucre, vigile y le dé un sentido democrático a las acciones que éstos realizan.

La doctora Alicia Ester Pereda Alfonso, de la Universidad Pedagógica Nacional, pidió promover un compromiso de lucha contra la violencia y la formación de estudiantes que prevengan y erradiquen estas conductas, así como llevar a cabo una vinculación con las políticas públicas para que sean aplicables.

Mañana martes, en su segundo día, el foro contará con ponentes del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y de la Comisión de Derechos Humanos (CNDH).

YRE/JGM