El objetivo común tanto de los legisladores como de la Secretaría de Salud es subir los impuestos a los cigarros, dijo Mauricio Hernández Ávila, subsecretario de Prevención y Promoción a la Salud.

Consideró que si los diputados deciden que el impuesto de tres pesos que se le busca aplicar por cada cajetilla de cigarros regrese al sector salud para contender con los gastos que ocasiona el tabaquismo y apoyar campañas de prevención "sería fantástico y representaría un negocio redondo para este país", expresó.

De igual forma, explicó que si estos recursos no regresan al Sistema Nacional de Salud, también es muy bueno para la salud pública porque se verá como disminuye el tabaco entre los jóvenes, sumado a que se disminuirán los gastos de atención.

Lo importante —dejo en claro el funcionario de la Secretaría de Salud— es que suban los impuestos al cigarro porque la industria tabacalera le cuesta mucho al país, y el mayor empleo que generan son para los médicos que tienen que contender con las enfermedades (El Universal online, 13:39, 14/12/06, nbsg).