Gerardo Cedillo, reportero: La construcción de una nueva sede para el Senado de la República no se cancelará o aplazará a pesar del recorte al presupuesto de la Cámara alta, aprobado por los diputados el pasado sábado en el Presupuesto de Egreso de la Federación 2007. Así lo afirmó Francisco Arroyo Vieyra, vicepresidente del Senado, quien descartó que dicha reducción pueda interpretarse como una venganza de los diputados, por haber eliminado del presupuesto el impuesto del 5% a los refrescos.

Dijo, que la decisión de los diputados de recortar recursos al Senado no puede interpretarse como un cálculo de mala fe, sino como un cálculo de la Cámara de Diputados en el sentido de que se necesitaba ese dinero para otras situaciones apremiantes como es el combate a la pobreza y canalizar mayores recursos a educación y a otros rubros.

Señaló que para la construcción de la nueva sede senatorial se tendrán que buscar otras alternativas, entre estas, buscar algún tipo de financiamiento o vender alguno de los edificios que son propiedad del Senado mexicano (Enfoque, Adriana Pérez Cañedo, 26/12/06, 13:31, gh)