La caída en el precio del petróleo es un llamado de atención para que durante 2007 los gobernadores manejen con prudencia y en forma muy conservadora el gasto presupuestal asignado a cada entidad federativa. La bonanza generada por el bono petrolero de los últimos tres años podría terminar este año, por ello es imprescindible que en los estados y municipios del país el manejo del gasto presupuestal se ejerza en forma "conservadora".

"Lo recomendable es que no estén esperando ingresos excedentes como los han tenido en los pasados tres años", advierte el presidente de la Comisión de Hacienda del Senado de la República, Gustavo Enrique Madero.

Existen algunos recursos provenientes del Fondo de Estabilización de los Ingresos Petroleros, figura creada desde 2001, donde se acumulan algunos recursos para respaldar el gasto futuro en inversión tanto de la Federación como de estados y municipios, precisó.

Sin embargo, dijo, es necesario tener presente que respecto al gasto 2006, en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2007 hubo un incremento de 216 mil millones de pesos, cifra imposible de cubrir con recursos del fondo que para finales de este año ascenderían a unos 50 mil millones de pesos.

De igual forma es vital reconocer que por cada dólar que sube o cae el precio de la mezcla mexicana de crudo en el mercado exterior, el gobierno recauda o deja de recibir entre ocho y nueve mil millones de pesos, dependiendo del volumen de crudo exportado (Notimex, El Universal online, 14:37, 15/01/07, nbsg).