Conductor: Tras la noticia dada ayer de que las ruinas mayas de Chichén Itzá están entre las maravillas del mundo, hoy amanece México con dudas y preguntas, pero particularmente una tiene qué ver con la propiedad de Chichén Itzá, ya que tres personas de una misma familia: Barbachán, empresarios del sector turístico, son dueños porque el bisabuelo compró la propiedad a un estadunidense, Thompson –en ese entonces no existía ni siquiera el INAH– sin embargo, lo curioso de esto es que hoy que entrevistamos a Hans, el dueño de la zona visitable donde está la Pirámide, el Juego de Pelota, etc., no es dueño de los monumentos pero sí del terreno y eso lo reconoce el Gobierno Federal; por su parte, el director del INAH dice que están tratando de negociar con él pero lo queremos adquirir, o sea que o nos lo dona o lo compramos o lo expropiamos.

Llama la atención que a partir de esto se abra una polémica sobre las tierras, porque resulta que otra parte de la familia Barbachán –Fernando Barbachán R.– nos hizo llegar unos documentos donde se prueba que ya hubo una donación, entonces yo no entiendo cómo es que el INAH está queriendo comprar unos terrenos que ya le donaron:

“Yo tengo a Chichén desde que nací (…) le compré a la familia los Hoteles Mayaland y Hacienda Uxmal hace casi 19 años y he tenido una larga trayectoria con el INAH, incluso por mi incursión en Playa Cart y tengo el gusto de haber sido el primer mexicano que construyó en una zona arqueológica donde se encuentran las principales estructuras arqueológicas, pero no todas están en esta zona porque es un área que abarca más de 1,550 Has”. (Hoy por hoy, Loret de Mola, 13:15, duración 5’, 09/07/07, reoc)