Joaquín López-Dóriga, colaborador: Cuando Martí Batres declaró que el PRD no podía moderarse porque perdería base no descubría nada, pero desde su doble posición como hombre de López Obrador en el Gobierno del Distrito Federal marcaba el derrotero de su partido, quien ha sido señalado como el comisario político de López Obrador en la estructura de Marcelo Ebrard, Martí Batres, habló con total honestidad: no hay espacio para los moderados, lo que sí se suma a lo dicho por su líder en la inauguración del Congreso Nacional del PRD tampoco lo hay para el centro, ni para quien llama a la derecha, estrechando espacios de opción, él, ellos, vamos, o nadie.
Desde esas dos directrices, Batres y López Obrador, sobre todo este último al PRD y en su defecto al Frente Amplio no les queda otra ruta más que la de endurecerse en la intransigencia como se endureció en la toma y bloqueo del corredor Zócalo-Juárez-Reforma.
Hoy la orden de quien se ha declarado presidente legítimo es mantener el desconocimiento a quien ha declarado presidente ilegítimo y con él a su gobierno (Cúpula Empresarial, Oscar. M. Beteta, 06:28,12”, A.L.)24/08/2007