Pablo Hiriart, colaborador: Yo no creo realmente que el documento final de la nueva legislación electoral vaya a contener todos estos elementos regresivos en el orden político y atentatorio a la libertad de expresión, como los tiene el borrador que ahora afinan los diputados y senadores en materia electoral.

Pero, por eso creo que no sería descabellado pensar que senadores y diputados hayan introducido de manera deliberada algunos artículos que son muy perturbadores, con el fin de asustar y, luego, que los retiren o modifiquen.

El borrador plantea que el Consejo General del IFE se reunirá con la Cámara Nacional de la Industria de la Radio y la Televisión a fin de presentarle los lineamientos generales aplicables a los noticieros respecto de la información o difusión de las actividades de campaña y precampaña de los artículos.

Hasta ahí la cita de este artículo, entonces me pregunto ¿no que no se iban a meter con los contenidos en noticieros de radio y televisión? ¿No que no había nada de qué preocuparse porque a senadores y diputados no les pasaba por la mente entrar a normar los informativos de los medios de comunicación?

Pues, ahí están unas pruebas de que sí van a entrar a noticieros y sí van a querer dar lineamientos para la conducción de los informativos en radio y televisión.

Los castigos a los medios de comunicación consisten en una fuerte multa y sacarlos del aire un tiempo

¿Quién va a tener ánimo, en los medios de comunicación, de realizar una entrevista con tamaña amenaza? ¿Dónde queda el derecho de la población a estar informada acerca de los planteamientos de los candidatos?

El IFE dispondrá de 48 minutos diarios en todas las estaciones de radio y canales de televisión del país, de los cuales 41 minutos serán precampañas.

¿No que la nueva legislación electoral iba poner fin a la espotización de la política? Habrá más spots que nunca, a toda hora y en todas las estaciones del país, la única diferencia es que ahora va a ser gratis para los partidos.

Y quizá lo más preocupante, y que no hay marcha atrás, es en la creación de una figura de contraloría general en el IFE, cuyo titular será designado por la Cámara de Diputados, es decir, por los partidos.

El IFE ya tiene un órgano de control interno que está sujeto a la Auditoría Superior de la Federación ¿para qué otra contraloría más?

Para que los jugadores, los partidos políticos, tengan el control sobre los árbitros electorales. Duración: 12’ 57”.