El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Jorge Zermeño Infante, sostuvo que no será con prejuicios o con temas tabú como se avanzará en la Reforma del Estado.

Al instalarse la Comisión Especial de la Reforma del Estado, Zermeño Infante llamó a los legisladores de todos los partidos a que en la discusión de ésta no haya temas tabú, vedados, ni prejuicios, y que se debata todo lo que se quiera pero con respeto. Planteó que de según las propuestas legislativas que han sido presentadas por los distintos grupos, en materia de Reforma del Estado, son muchas más las coincidencias que las divergencias que existen.

Subrayó que "seguramente no estaremos al ciento por ciento de acuerdo todos en todo, porque hay distintas maneras de enfocar y de ver las cosas, pero si somos capaces de procesar de la mejor manera posible los consensos, estoy seguro de que vamos avanzar".

La presidenta de la Comisión Especial para la Reforma del Estado, Silvia Oliva Fragoso, afirmó que la instalación de esta instancia abre la posibilidad para llegar a acuerdos sobre los alcances y contenidos de una agenda que no ha sido posible concretar. Consideró que el conservadurismo de los partidos y la defensa de sus más inmediatos intereses políticos han bloqueado los posibles acuerdos, con lo que se ha puesto una mayor distancia respecto a los reclamos sociales.

A su vez, el priísta Marco Antonio Bernal afirmó que su partido presentó una iniciativa de Ley para la Reforma del Estado porque "este es el momento de que el Poder Legislativo puede atraer a sus espacios una verdadera discusión del tema". Consideró que la ley posibilitaría que se dejara de satanizar el poder tener acuerdos y que los partidos digan francamente con quien coinciden y con quien no.

Consideró que lo más importante es que "da la oportunidad de que el acuerdo que tengamos inmediatamente pueda llegar a las Cámaras y sea legislado por nosotros, y ese es el espíritu de la ley que el PRI presentó en el Senado y que la bancada en San Lázaro suscribió".

El perredista David Mendoza aclaró que su partido no apuesta a socavar las instituciones sino a fortalecerlas, y en ese sentido resaltó que los cambios se deben dar por la vía de la legalidad y de las instituciones.

Para el PRD la asignatura pendiente es una nueva generación de reformas en materia electoral, que incluya la fiscalización de las precampañas, la no intervención de actores que no deben hacerlo y la homologación de calendarios electorales, entre otras cosas, expuso (Notimex, 13:28, 31/01/07, nbsg).